La gran mayoría de la sociedad cochabambina es inducida a desconocer las implicancias de las transformaciones territoriales en la región. Decimos inducida, porque no se posibilitan oportunidades ni se constatan las predisposiciones pertinentes de algunas autoridades responsables para hacer conocer de manera continuada a la población organizada y al ciudadano de a pie, de estas transformaciones territoriales y sus implicancias mediante representaciones geográficas, es decir, mapas que queden en poder de los mismos, para que analicen, reflexionen, hagan sus requerimientos de aclaraciones, expongan sus observaciones y formulen las sugerencias del caso. 

La táctica prevaleciente es dar a conocer estas noticias por los medios de comunicación en forma descriptiva, novedosa, fragmentada y por una o dos veces, para en lo posible no volver a tocar el tema ulteriormente. Es decir, para que se evaporen de la memoria colectiva los temas en cuestión, por lo abstracto de lo relatado y por el sentido dado de acontecimientos neutros, inocentes y superfluos.

Se acerca un nuevo 14 de septiembre y, como acontece tradicionalmente, nos van a frotar nuestro ego cochabambino con medallas y diplomas de reconocimiento a personas e instituciones “de oro”. Además de algunas inversiones para el desarrollo cochabambino, junto a la entrega de obras trabajadas por “partes” adornadas de promesas y elogios, hasta el próximo 14 de septiembre.

Algunos ejemplos: las extensiones de las tres vías del tren eléctrico metropolitano, la localización de sus 43 estaciones y las características de la inversión. Los tramos de cobertura en la región de las tuberías de aducción para las aguas de Misicuni, tanques de almacenamiento, capacidad de litros/segundo, modalidades de uso y sus características de financiamiento. La ubicación de las plantas de tratamiento de aguas residuales en los municipios, la ampliación de la laguna de oxidación de Alba Rancho y el proyecto de la planta de tratamiento de residuos sólidos como solución a K’ara K’ara, indicando la composición de las inversiones implicadas. El proyecto de la Planta de Producción de Fertilizantes Granulados NPK a construirse en el municipio de Santiváñez y su relación con el Parque Industrial cochabambino que “duerme” en ese mismo municipio, etc. Todos estos eventos territoriales están relacionados entre sí de múltiples maneras, constituyen un saber estratégico que reorganiza el territorio y la forma de habitar de las personas. Lamentablemente, estas relaciones están invisibilizadas ¿a propósito?

CIUDAD SUSTENTABLE

GERMÁN TÓRREZ MOLINA

Economista

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