Primeros vacunados, primera línea de respuesta al COVID
A escasos metros de un panel construido en predios del SEDES, en memoria de los Ángeles de Blanco, fallecidos a causa del COVID-19, donde están presentes las imágenes de amigos, colegas, funcionarios del personal sanitario que nos dejaron en la primera ola que se produjo en el año pasado, el 2 de marzo se inició la vacunación masiva contra el coronavirus a todo el personal del SEDES, que han estado y están en la “primera línea” de la respuesta al virus en Cochabamba.
Mucha expectativa se produjo en este primer día de vacunación; por las diferentes reacciones de las personas, en su mayoría expresó que era una de las decisiones más importantes de vacunarse para evitar complicaciones en su salud. Un porcentaje mínimo de personal afirmó que no se realizaría la vacunación porque tenía “mucho miedo”. El proceso de la vacunación fue muy interesante, ya que el Programa Ampliado de Inmunizaciones (PAI), encargado de todo lo que significan las vacunas, armó toda una logística para que todo esté bajo control y la vacunación sea de manera ordenada y exitosa.
Para resaltar, el armado de un espacio del Servicio de Pre-Consejería para la vacuna del COVID 19, donde un personal capacitado procedió a informar, a sensibilizar de la importancia de la vacunación, sacando todas las dudas, para que las personas puedan tomar la decisión de realizarse la vacuna con mucha confianza y seguridad. Se conoce que la vacuna es de la marca Shinopharm de la China y el beneficio de esta que es preventiva para evitar complicaciones graves y severas, y que eviten el ingreso a las unidades de terapia intensiva de los pacientes.
Entre las contraindicaciones para que las personas no puedan acceder a la vacunación, socializaron lo siguiente: si una persona adquirió la enfermedad recientemente, tiene que esperar 90 días para hacerse vacunar, haber estado en contacto en estos últimos días con una persona que haya dado positivo al COVID 19, si una persona presenta alguna dificultad respiratoria o algunos síntomas como la tos, dolor de garganta, de cabeza, fiebre, o si la persona presenta una enfermedad de base. Pusieron bastante énfasis en las mujeres que están en edad reproductiva y que estén embarazadas, reiterando que no podrían vacunarse.
También realizaron las recomendaciones post-vacunación, señalando que puede haber un poco de dolor, enrojecimiento, calor en el sitio de la aplicación de la vacuna, que no se debe tocar, frotar, rascar, colocar calor ni frío, ya que los síntomas desaparecen por si solos y las reacciones en cada cuerpo es distinta a otra. Otro aspecto importante de este apoyo de este Servicio de Consejería es hacer el seguimiento y monitoreo 72 horas posterior a la aplicación de la vacuna; si alguna persona presenta fiebre, vómitos, diarrea, dolores articulares, musculares, entre otros, debe comunicar inmediatamente al SEDES, llenando un formulario específico. También recomendaron que no se podía tomar bebidas alcohólicas por el tiempo de 40 días, lo que generó mucha preocupación en algunos varones que se realizaron la vacuna.
Después de esta importante información, la persona firma el consentimiento informado para acceder a la vacuna y la importancia de volver en 21 días para la aplicación de la segunda dosis. Seguidamente a este proceso, otro equipo organizado procede con mucha calma y concentración, tomando muy en cuenta las medidas de bioseguridad a la aplicación de la vacuna y finalmente a la persona recibe su certificado de vacuna contra el coronavirus.
Procesos muy importantes que también se están cumpliendo en todas las instituciones de salud, que están aplicando la vacuna contra el COVID-19, por lo que creemos que se vienen días de mucha esperanza para disminuir sobre todo la mortalidad del virus y así de esta manera volver a otra normalidad que anhelamos todos nosotros.
GÁRGARAS DE SAL
FREDDY R. ZAMBRANA H.
Psicólogo