El mundo del trabajo no será el mismo el día de mañana, todos se preguntan: ¿qué viene después de esta pandemia?, ¿cómo afectará a las actividades productivas y relaciones laborales? Sin duda, para comprender esta crítica situación, es importante escudriñar los informes de los organismos internacionales, los criterios profesionales de los especialistas en la materia y cientistas que día a día orientan, advierten y recomiendan el cuidado que debemos seguir para evitar contraer el contagio del coronavirus (COVID-19). 

Su eliminación dependerá del cumplimiento disciplinado del distanciamiento y cambio radical de hábitos; los valores humanos cambiarán radicalmente, el mundo está reconociendo el valioso trabajo de mujeres y hombres del sector de salud. Se resaltarán los esfuerzos de los trabajadores de alimentos, aseo, desinfección entre otros esenciales, que están prácticamente arriesgando su vida en este periodo de cuarentena; de ahí que los cambios serán obligatorios en el mundo del trabajo.

Mañana se exigirá el concurso de aquellas actividades que se adecuen a las nuevas condiciones que cumplan el distanciamiento y el mínimo de riesgo para evitar contagios; con seguridad, se profundizarán las actividades laborales del teletrabajo, los medios digitales de tecnologías de información y comunicación, como otros análogos. También se profundizarán las actividades relacionadas al trabajo a domicilio, basados en la satisfacción prácticamente virtual, que deberá generar confianza con sus clientes; los envases, empaques y cubiertas de muchos productos tendrán que ser rediseñados, bajo protocolos de bioseguridad por mucho tiempo.

Las actividades sociales, deportivas, artísticas, culturales y eventos que aglutinan a grandes multitudes, serán afectados y tendrán que migrar a otro tipo de producción virtual. Sin duda, el día de mañana el mundo del trabajo no será el mismo, estaremos  obligados a adecuarnos a nuevos paradigmas, de tal manera que posiblemente las tele-terapias serán necesarias para evitar la depresión y problemas psicológicos; sin embargo, el ser humano es creativo, inteligente y saldrá adelante. Los nuevos hábitos laborales se fortalecerán y avanzarán a pasos agigantados, el motor de la economía se reactivará con el aporte del capital humano, que en este momento es el tesoro más preciado a cuidar.