El turismo es uno de los sectores más golpeados por el coronavirus y necesitará varios años para recuperarse. Para incentivarlo, el gobierno aprobó el Decreto Supremo Nro.4400 que establece vacaciones de fin de año, permiso excepcional y facilidades de pago a favor de los funcionarios públicos y privados.

En el caso de los trabajadores estatales, la norma define que tendrán vacaciones escalonadas al menos 10 días hábiles, entre el 15 de diciembre de 2020 hasta el 31 de diciembre de 2021. Podrán acceder a un permiso excepcional con goce de haberes, equivalente hasta un 30% del tiempo de vacación utilizado en la actividad turística, a los que adquieran paquetes turísticos nacionales. También habrá un día de permiso excepcional con goce de haberes, a los que adquieran un paquete turístico interno de al menos cuatro días, vinculados a un fin de semana.

En el caso de los funcionarios del sector privado tienen que considerar los acuerdos suscritos entre empleadores y empleados.

La decisión del gobierno de Luis Arce Catacora suena interesante, considerando las fiestas de fin de año,  tiempo que siempre es aprovechado por las familias para hacer turismo.

Si bien todavía no está totalmente reactivado el sector turístico, porque recién se están autorizando algunas actividades que están estrechamente ligadas con los servicios que deben ofrecer a los turistas, el decreto motivará a los empresarios dedicados a este rubro para que agilicen los preparativos y estén listos para recibir a los visitantes que decidan invertir en unas vacaciones con sus familias.

El reglamento de la norma aún no fue aprobado, pero se espera raye bien la cancha para definir qué estará permitido que hagan los turistas. Asimismo, deberá establecer las estrictas medidas de bioseguridad para evitar cualquier riesgo.

No se puede jugar con la salud y la vida de los bolivianos, más aún ahora que existe un riesgo de un posible rebrote del mortal virus.

Todos los incentivos que se ofrezcan para reactivar el turismo son importantes, porque es una actividad que tiene efectos multiplicadores, pero todo con prevención.

El presidente de la Asociación Boliviana de Agencias de Viaje y Turismo (Abavyt) y Sector Privado de Turismo (Septur), Marco Mercado, dijo que está gestión cerrarán con pérdidas que ascienden a más de 1.000 millones de dólares por los más de ocho meses de paralización, y hay 100.000 empleos directos que están en riesgo.

Ese importante sector necesitará del apoyo del gobierno, gobernaciones y alcaldías, pero también de los millones de bolivianos para que apuesten por destinos nacionales cuando decidan vacacionar.

Compromiso

Bolivia tiene un gran potencial turístico y es el momento de que todos los bolivianos los visiten y ayuden a reactivar al sector.