Opinión Bolivia

  • Diario Digital | miércoles, 24 de abril de 2024
  • Actualizado 15:06

Más allá de un acuerdo para bonos

Más allá de un acuerdo para bonos

Cuando falta poco más de dos meses para que se realicen las elecciones generales en el país, la presidenta Jeanine Áñez lanzó ayer un desafío a los candidatos de las diferentes organizaciones políticas para que pueda consolidarse un gran acuerdo nacional que viabilice el pago de bonos en la gestión 2021.

La propuesta que fue dada a conocer durante su discurso por el 195 aniversario de la independencia de Bolivia, considera importante el pago del Bono Salud, el mismo que no puede ser consolidado debido a que la Asamblea Legislativa Plurinacional, dominada por el Movimiento Al Socialismo (MAS), no aprueba los créditos de organismos internacionales que están destinados para ese fin. 

Asimismo, la Mandataria planteó que el ganador de las elecciones también asegure la cancelación de los bonos Canasta Familiar (400 bolivianos destinado a los adultos mayores que reciben Renta Dignidad, madres que se benefician con el bono Juana Azurduy y personas con discapacidad que acceden al bono de discapacidad que entregan las alcaldías); Familia (500 bolivianos por cada hijo que estudie en un colegio fiscal, privado o de convenio)  y Universal (500 bolivianos para los mayores de 18 años y menores de 60 años que no reciban ninguno de los otros bonos).

El llamado a los candidatos para firmar un acuerdo o pacto, sin lugar a dudas, sorprendió, pero también  produjo varias interrogantes. De seguro, muchos se han preguntado ¿por qué no hizo ese tipo de convocatoria para enfrentar al coronavirus que está matando a miles de bolivianos? O ¿por qué se preocupa por el pago de bonos y no por los otros temas que están agobiando al país? Nadie puede dudar de que el pago de los bonos está ayudando a millones de familias bolivianas a sobrellevar la crisis económica derivada de la pandemia, pero, también es claro que solo es un paliativo. Bolivia necesita reactivar el aparato productivo, generar empleo y, principalmente, requiere certidumbre. 

La Presidenta debería convocar a un gran diálogo nacional con todos los actores políticos, sociales, económicos para darle viabilidad al país. Nunca es tarde cuando hay voluntad para hacer bien las cosas y cuando se antepone el interés de todos los bolivianos y no de unos cuántos.

El país está viviendo momentos muy complicados con la COVID-19, que a diario contagia y mata a decenas de personas. Es importante que los líderes políticos y la Mandataria dejen de lado sus pretensiones electorales y de una vez piensen en el bien de las mayorías, ya que no solo hablamos de salud, sino de vidas. 

Lamentablemente, ni el día de la patria se pudo hacer algo sin que los intereses y mezquindades políticas estén inmersos. ¿Hasta cuándo estaremos así?