Opinión Bolivia

  • Diario Digital | viernes, 29 de marzo de 2024
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Legalización del aborto gana terreno

Legalización del aborto gana terreno

Colombia es el séptimo país de Latinoamérica en despenalizar el aborto, por lo que es posible recurrir a esta medida hasta la semana 24 de gestación. Así, el país cafetalero se une a Argentina, México, Uruguay, Cuba, Guyana y Guyana Francesa, naciones en las cuales su legislatura permite la interrupción del embarazo bajo determinadas circunstancias.

Permitir legalmente o no el aborto es un tema que ha desatado más de una polémica en todo el mundo, porque por una parte hay grupos de activistas que defienden esta postura como un derecho de la mujer a decidir si lleva adelante un embarazo o no, mientras que en la otra orilla se encuentran las personas que están en desacuerdo con que se interrumpa una gestación debido a que consideran que se priva a un ser humano del derecho a vivir.

Las legislaciones permiten el aborto por varias causales, entre ellas si la vida de la madre corre riesgo, si de por medio hubo una violación o en caso de que el feto presente malformaciones. El tiempo en los países, cuya legislación permite la interrupción del embarazo, varía desde las 12 semanas, en México, hasta las 24 como se aprobó en Colombia.

Cada sector que expresa su apoyo o rechazo al aborto tiene argumentos para sustentar su postura, por lo que lo más sano es buscar un equilibrio para que la interrupción del embarazo se realice cuando sea  necesario, es decir, si hay una causa justificada.

En Bolivia, el aborto es permitido bajo circunstancias específicas, por ejemplo, en casos de incesto, violación, cuando peligra la vida de la embarazada o si se detectan malformaciones en el feto.

No obstante, en algunos casos los médicos se han negado a realizar un aborto, aludiendo a su ética, incluso cuando de por medio existe una orden judicial que instruye la interrupción del embarazo, especialmente cuando se trata de una menor.

Lo que se trata de evitar con los abortos legales, autorizados por la justicia, es que las mujeres dejen de acudir a clínicas que practican la interrupción del embarazo en condiciones insalubres y con elevado riesgo para su vida.

En esos casos, varias mujeres que se sometieron a un aborto ilegal perdieron la vida.

Pero el aborto tampoco debería ser utilizado a discreción, sino que solamente cuando realmente es necesario y, en todo caso, se tendrá que ir ajustando según la experiencia, de modo que no haya complicaciones en la salud de las mujeres.

Pero, antes de pensar en la interrupción de los embarazos se debe trabajar en la educación sexual a partir de los hogares y de los colegios para evitar los embarazos no deseados, y erradicar delitos tan execrables como el incesto y las recurrentes violaciones que se han incrementado en los últimos años en el país, y lamentablemente las víctimas son cada vez más jóvenes.

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