Opinión Bolivia

  • Diario Digital | viernes, 19 de abril de 2024
  • Actualizado 13:26

Un Censo técnico, no político

Un Censo técnico, no político

Definir la fecha del Censo Nacional de Población y Vivienda, en una mesa técnica, es el objetivo que propugna el Gobierno, de modo que se deje de lado los argumentos políticos y se determine si se debe realizar esta gran encuesta en 2023 o 2024.

O por lo menos ese es el discurso que maneja el Ejecutivo a la cabeza del presidente Luis Arce, mientras que los cívicos de Santa Cruz exigen que se abrogue el Decreto 4760, la pacificación del departamento y la liberación de aprehendidos, entre otras demandas, como condiciones para formar parte de la mesa técnica.

Si hay un punto en el que todos están de acuerdo (o la mayoría) es que la fecha del Censo se debe definir desde una instancia técnica, pero lo que está costando es que las partes enfrentadas se pongan de acuerdo y determinen las reglas para que sus equipos respectivos trabajen en esa línea.

No es suficiente que todos hablen de una mesa técnica, de un equipo amplio para definir la fecha del Censo, si por detrás las declaraciones políticas siguen obstaculizando este trabajo que ya debió haber comenzado hace varios días.

Mientras el Gobierno “se desgañita” insistiendo en una mesa técnica, uno de sus ministros, Eduardo del Castillo, aseguró que es imposible la realización del Censo en 2023. Y si bien las declaraciones del titular de Gobierno fueron desvirtuadas, esa es una señal inequívoca que ni en el mismo Ejecutivo hay consenso sobre la forma de definir la fecha del Censo.

Además, mientras el Gobierno reitera la urgente necesidad de recurrir a una comisión técnica para definir cuándo se realiza el Censo, la publicidad que se emite por varios canales refuerza por qué no es posible realizar el Censo en 2023.

Si el Gobierno tiene una postura sobre cómo se debe definir la fecha del Censo, que sea consecuente, es decir, que no se afirme algo un día y se diga otra cosa al siguiente.

El país requiere certidumbre, que no se consigue con paros, cercos ni violencia, sino con decisiones claras y alejadas de la política. La población espera que esta semana se defina la fecha del Censo, la que sea más conveniente para el país y que se dejen los discursos violentos de uno y otro lado que no contribuyen a seguir adelante.

Y si la mesa técnica para determinar la fecha del Censo se realiza solo con especialistas de uno u otro sector no tendrá mucha validez, porque se requiere la mayor participación de especialistas.

Si los técnicos de ambos sectores se reúnen con la mayor predisposición posible, lo más seguro es que se pueda definir la fecha del Censo en unos cuantos días y no en semanas como inicialmente se anticipó, porque el país ya no quiere sufrir más violencia ni ser testigo cómo se destruye todo lo que se consiguió en los últimos años, por culpa del capricho y la tozudez de unos cuantos.