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  • Diario Digital | miércoles, 24 de abril de 2024
  • Actualizado 05:26

El arte sale a la calle sobre ruedas

El arte sale a la calle sobre ruedas

Los pasajeros que suban al micro del chofer Johnny Rueta, de la línea H, podrán apreciar, durante el tiempo que dure su recorrido, una exposición de fotografías que retrata las cualidades más representativas de la cultura cochabambina, gracias a una iniciativa del colectivo Tragaluz.

Esta exposición, que ya recorre las calles de la Llajta, es un oasis para quienes aprecian las artes en todas sus manifestaciones, porque durante un año las galerías de exposición y los teatros, entre otros espacios culturales, han estado cerrados a causa de la pandemia del coronavirus que afecta a todo el mundo.

La denominada MicroGalería qhochala debería ser la punta de lanza para que surjan y se implementen otros proyectos similares que estén orientados a llevar la cultura a todos los barrios de Cochabamba, para que niños, jóvenes y adultos tengan la posibilidad de ver de cerca el trabajo de los artistas, entre ellos escultores, pintores, dramaturgos, cuentacuentos, poetas y actores de teatro.

La cultura debe ser democrática, es decir, llegar a todos sin restricción, y la única forma es haciéndola más accesible, para que no solo un puñado de personas pueda regocijarse con la creación de los artistas. Por eso, consideramos que es plausible el trabajo del colectivo Tragaluz en la Llajta.

Ximena Toro, tras la puesta en marcha de este proyecto, señaló que “con esta iniciativa, la gente no va a tener la necesidad de ir a una galería: se va a subir a un micro y va a encontrar arte”.

La idea es justamente esa, que la cultura en todas sus manifestaciones, reiteramos, llegue a la gente de los barrios más alejados, que sea accesible para los vecinos, que se incentive el arte especialmente entre los jóvenes, porque esa será una forma para descubrir nuevos talentos.

A partir de esta iniciativa, que estamos seguros recibirá el apoyo de la población, es tarea de las autoridades municipales y departamentales trabajar en la elaboración de proyectos culturales, un espacio que, por cierto, funciona como la quinta rueda del carro, con un mísero presupuesto y como si fuera un tema sin importancia.

Además de mejorar el presupuesto para cultura, las autoridades tendrán que trabajar en la implementación de espacios para  los artistas y lugares donde puedan exponer sus obras. 

La elaboración de leyes que protejan a los artistas, pero que se cumplan en la práctica, es otra asignatura pendiente y que debe resolverse a la brevedad posible.

En suma, es necesario apoyar todas las manifestaciones culturales, porque esa es la mejor inversión que puede hacer un gobierno, para el crecimiento y desarrollo de la sociedad en su conjunto.

Accesible

La cultura debe ser democrática, es decir, llegar a todos sin restricción, y la única forma es haciéndola más accesible, para que no solo un puñado de personas pueda regocijarse con la creación de los artistas.