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  • Diario Digital | jueves, 25 de abril de 2024
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Analizar las “recetas” del FMI

Analizar las “recetas” del FMI

El Gobierno de Bolivia rechazó las recomendaciones que hizo el Fondo Monetario Internacional (FMI) orientadas a ajustar el tipo de cambio con respecto al dólar y a reducir gastos y subsidios a los combustibles.

Si eso ocurriera, el Gobierno tendría que eliminar algunos subsidios como el de los combustibles y dejar de pagar el aguinaldo de fin de año, medidas que afectarían a miles de asalariados y propietarios de vehículos.

A diferencia de lo que normalmente ocurría en el pasado, con otros gobiernos, la actual administración del Estado, a la cabeza de Luis Arce Catacora, afirmó que no aceptará “ese tipo de recomendaciones”, porque “tenemos un país soberano, tenemos una política económica soberana desde el año 2006”.

El ministro de Economía y Finanzas, Marcelo Montenegro, destacó el reconocimiento que hizo el FMI de los logros económicos que obtuvo Bolivia en los últimos años, pero rechazó tajantemente las “viejas recetas” que este organismo internacional viene imponiendo a los gobiernos del mundo en las últimas décadas, y que en muchos casos cumplen al pie de la letra para no ser amonestados por este organismo internacional que maneja miles de millones de dólares.

Al respecto de las recomendaciones hechas por el FMI, el Gobierno boliviano debería rechazar o tomar en cuenta algunas después de realizar un análisis exhaustivo, de acuerdo a los intereses del país y sin dejar de lado el contexto internacional, porque Bolivia no es una isla y depende también de las economías de otras naciones.

Si una recomendación del FMI atenta contra la economía de las personas más vulnerables, no vale la pena tomarla en cuenta y sería mejor acudir a otras soluciones con el fin de fortalecer el aparato productivo del país, pero siempre con el objetivo de mejorar la calidad de vida de los más de11 millones de bolivianos que viven en territorio nacional.

El ministro de Economía argumentó su decisión de rechazar las recomendaciones del FMI debido a que la economía nacional tiene la inflación más baja de Suramérica, porque incrementó su recaudación tributaria y logró un superávit comercial gracias al repunte de las exportaciones no tradicionales en los últimos meses.

Otras recomendaciones del FMI es reducir el contrabando y la informalidad que afectan al país. Sobre estos aspectos, es pertinente que el Gobierno reconozca los dos problemas que atingen a la economía del país, uno de ellos, el creciente contrabando que ingresa por las extensas y descuidadas fronteras con países vecinos.

Asimismo, el Gobierno debe trabajar para acabar con la informalidad en dos frentes, en lo que se refiere a los miles de empleos precarios y a las empresas que, por algunas trabas burocráticas, prefieren operar sin poner en orden todos sus papeles.