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  • Diario Digital | miércoles, 24 de abril de 2024
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La llama ardiente

La llama ardiente

No hay nada más subversivo que un libro, tal afirmación halla su sustento en hechos que la humanidad puede constatar a lo largo de toda su historia. Los  tiranos, en su afán de sustentarse en el poder, controlar a los inconformes, rebeldes y contestarlos, inventaron la hoguera atizando las llamas con folios creyendo, insanamente, que extinguían sediciosos y el pensamiento liberador.

En el transcurso de los tiempos: papiros, maderos con inscripciones, cueros, bordados, pórticos, ídolos de todo material, fueron calcinados. Se quemaron a escritores, bibliotecarios, libreros y lectores. Lo dicho no es un mal resumen de las novelas de George Orwell o Bradbury. Toda dictadura crema bibliotecas, siempre habrá libros que cuestionen el poder omnímodo, el ideario oficial. En nuestra historia patria, hay suficientes y patéticos hechos que muestran hordas danzando frenéticos en torno a las llamas de los libros condenados.

Pocos meses antes de iniciarse la pandemia, noviembre del 2019, un ensayo de la española Irene Vallejo sorprendió con su éxito al mundo todo. Millones de ejemplares vendidos, 36 ediciones en diferentes idiomas; la autora, filóloga, nacida en España, Zaragoza; el título de la obra: “El infinito en un junco”. Este libro nacido bajo el amparo de las buenas letras, narra el surgimiento de los libros desde sus inicios, génesis que tuvo su materia prima en los juncos macerados, extendidos, enrollados, y sobre los cuales los hombres depositaron sus pensamientos dibujando las saltarinas letras del abecedario.

Se trata de una investigación puntillosa sobre el ayer, el presente y el futuro de ese artefacto que cautiva la mente, la razón y el espíritu: en el se hallan impresos los alfabetos, estos nos conducen a los mundos de la expresión y sus manifestaciones: filosofía, arte,  ciencia. Un mundo sobre la erudición contado elegantemente, con acotaciones de sentimiento personal. El Nobel Vargas Llosa, con la autoridad que le respalda dirá: que es un libro que se seguirá leyendo generación tras generación. Otros autores reconocidos  como H.A. Faciolince y Volpi, sostendrán por su parte: «El infinito en un junco nos permite volver a tener esperanza en nosotros mismos y en nuestra imaginación”.” La gran empresa del libro es una de nuestras grandes conquistas como especie”.

TEXTUAL

"CUCHO" JORDÁN Q.

Abogado, docente e  historiador del Derecho

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