Me hubiera gustado no estar con la razón sobre el manejo de BoA. Sin embargo, quiero aclarar a uno de ellos y decirle que BoA, si bien es empresa estatal, es de todos los bolivianos. Asimismo, que el artículo 354 del Código de Comercio señala claramente que si una empresa pierde el 50% de su capital, la reducción de capital es obligatoria; si efectuada la reducción del capital, este resultara insuficiente para cumplir el objeto de la sociedad, se procederá a la disolución y liquidación de la misma. Todo esto se considera una quiebra técnica.

Como podrán deducir de todo esto, no lo digo yo, lo dice la ley. Los que mandaron una nota a este medio de comunicación haciendo una aclaración a una columna que escribí sobre la realidad de BoA, se equivocaron porque no se ajusta a la realidad. Es de conocimiento público el manejo que se hizo  y me remito a las declaraciones del actual gerente de la línea aérea, del Ministro de Obras Públicas y del propio presidente Luis Arce, que hablaron de la mala forma que se manejó la empresa durante el anterior gobierno. 

Decir que para hacer un cambio de flota se necesita un estudio profundo, es terrible. Esto denota que las anteriores autoridades no tenían el mínimo conocimiento de la aeronáutica; ya Boeing les dio todos los estudios donde está demostrado que el 787 es el avión ideal. Delta, Air Europa y otras dejaron los Airbus y pusieron los 787 Boeing al servicio de su empresa. Asimismo, existe una realidad innegable que muestra cómo hay varios Airbus tirados en los desiertos, ¿o me dirán que estas empresas no hicieron un estudio profundo para el cambio de equipo de vuelo?. 

Hubiera sido bueno que se informen antes de mandar notas aclaratorias que solo los hace quedar mal a más uno de ellos que tiene un hermano que fue piloto. Hacer volar más en tramos  cortos sus aeronaves de BoA es castigar ciclos y dañar el motor por lo corto del vuelo,  la prueba es ¿cuántas aeronaves paradas tiene BoA? Esa es la mejor respuesta a mi nota sobre la compañía.

Ustedes que son dos excompañeros de trabajo, pero que dejaron la actividad mientras yo sigo activo, después de haber sido director de casi todas las  empresas aéreas en Bolivia y de dos en el extranjero, no me extraña que le hayan tomado el pelo al exministro de Obras Publicas y a su  viceministro de Transportes que ignoraban la materia aeronáutica y el gobierno les hizo creer que con un contrato por cinco años estaban seguros en sus cargos. Pena, ninguno duró creo que ni seis meses y los dos son fuertemente criticados por las nuevas autoridades. Reitero, no lo digo yo, están las notas en los medios de comunicación.

EN VUELO

CONSTANTINO KLARIC F.

Asesor aeronáutico

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