Protejamos al turismo
Por motivo de trabajo, me tocó estar en Argentina, Uruguay y Paraguay. Quedé impresionado por la gran cantidad de ventajas que tiene el turista que visita estos países después de las restricciones por la COVID-19.
El turismo es algo que en Bolivia no le damos la importancia necesaria pese a que atrae divisas y genera un gran movimiento económico.
La industria sin chimenea es un mundo de posibilidades que permite ingresos de millones de dólares para regiones que promocionan sus propios atractivos y brindan facilidades, y desechan los obstáculos que impiden el ingreso de los visitantes.
Cuando estás en otros países y vas a los consulados bolivianos, la falencia es tan grande que no te brindan datos para visitar lugares de interés o atractivos de nuestro país. En la mayoría de los casos, por poco no te desaniman porque están cerrados o no hay personal que dé información.
El 85% de los turistas de Latinoamérica prefiere visitar los países antes señalados, menos Bolivia, porque al ingresar funcionarios de Migración piden muchos documentos y hacen llenar formularios.
En Bolivia, en lugar de decirte ‘bienvenido’, lo primero que preguntan es ¿a qué ha venido? ¿Dónde se alojará? y otras cosas más. En vez de recibir con una sonrisa y decir que si deseas quedarte más de 90 días pases por estas oficinas, ponen mala cara y más restricciones. En otros países, no cobran el IVA ya que, a diferencia de Bolivia, están conscientes que un turista al traer divisas ya es bienvenido y no tiene necesidad de pagar impuestos porque solo está de tránsito.
Los funcionarios de Aduana en otros países que visité, tienen una amabilidad extrema y cuentan con los mismos scanner que hay en Bolivia para revisar, solo observan si encuentran algo extraño. En Bolivia, la realidad es distinta; desde que el pasajero baja del avión en Viru Viru, los funcionarios al parecer no comprenden lo que muestra el scanner y obligan a abrir maletas. Empieza el martirio del pasajero que debe responden preguntas como: ¿para qué lleva papel higiénico? y quieren revisar todo y a todos, lo que ocasiona grandes filas y pérdidas de conexiones para los que viajan a otros destinos fuera o al interior del país.
Los connacionales que vuelven al país quedan decepcionados por cómo los tratan a su retorno. Ojalá la dirección de Aduana mejore este servicio y pida más amabilidad a sus funcionarios. Por otra parte, es importante que las autoridades aeronáuticas den todas las facilidades para que empresas aéreas privadas bolivianas puedan hacer servicios de chárter para grupos deportivos o de artistas que visitan Bolivia, así las divisas que tanto se necesitan, se quedan en el país y generan fuentes de trabajo.
EN VUELO
CONSTANTINO KLARIC F.
Experto en aeronáutica