La palabra texto tiene el mismo origen etimológico que la palabra tejido. Precisamente, la tapa del libro Relatos de Investigadoras Bolivianas llama la atención, porque detrás de la imagen de unas manos tejiendo, se encuentran mujeres que dan origen a los hilos que se entrelazan.

Esta metáfora que aprovecha la imagen y la palabra, sirve muy bien para presentar las narraciones de un grupo heterogéneo de mujeres, quienes comparten un pequeño pero significativo y valioso pedazo del hilo de su vida.

Pero, estos fragmentos de vida no han sido elegidos al azar, son experiencias vinculadas a la labor de la investigación, a la construcción de conocimiento en la búsqueda de soluciones y respuestas para bien de nuestra sociedad y de la humanidad.

Inspirador sin duda, pero también, son historias que llaman apremiadamente a la reflexión sobre dos aspectos: el valor que como sociedad le damos a la ciencia, así como también del papel fundamental de la mujer en la construcción de cultura. Ambos, infravalorados.

Resalta en este tejido de experiencias, que quienes están detrás de la elaboración de la obra se encuentran mujeres de distintas edades y de diferentes procedencias, quienes desde su visión y competencias, cada una a su manera, dejan constancia de sus prácticas, sus sueños, sus dificultades, sus preocupaciones y sus victorias.

Vale la pena adentrarse en estos relatos para percibir la variedad de espacios que se han tenido que conquistar con fatiga, quien más y quien menos, cuesta arriba, con resiliencia, con sororidad, solidaridad y superación cotidiana.

Estos relatos se constituyen en una evidencia histórica tanto del anhelo de científicas por contribuir desde la investigación, cueste lo que cueste, a la construcción de una humanidad mejor en nuestro pedazo de territorio e incluso más allá. 

Pero, no deja de ser menos importante la autoimagen de la mujer jugando posiciones en su propia cancha, pero en un juego al cual muchas veces no ha sido llamada.

Es grato saber que, en la Universidad Católica Boliviana, las coordinaciones de investigación son dirigidas por mujeres, que las sociedades científicas de estudiantes y los centros de investigación están compuestos y muchos tienen a la cabeza a jóvenes mujeres bolivianas que día a día, desde la intelectualidad y desde la práctica de campo, aportan a la sociedad boliviana y a la comunidad científica internacional.

CONSTRUIR COMUNIDAD

ALFONSO ALARCÓN

Docente Tiempo Completo Comunicación Social Universidad Católica Boliviana 

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