La típica acción de coger un  periódico para leerlo u hojearlo por una o varias personas, ya sea en casa o con el café de media mañana, es segura y no supone ningún tipo de contagio por coronavirus. Así lo establece la Organización Mundial de la Salud (OMS), que recalca que el riesgo de transmisión de la COVID-19 por el papel impreso es "infinitamente insignificante".

Según un análisis de los principales institutos científicos y virólogos españoles, "nunca se ha documentado la transmisión de la COVID-19 a través de papel de periódico ni tampoco por su uso compartido (con otras personas)”. 

"Las primeras investigaciones científicas sobre la transmisión del virus a través de superficies sugieren que las porosas tienen menor potencia y durabilidad", señala la Asociación de Medios de Información (AMI), con base en los estudios de los expertos citados. 

A ello se suman las medidas de protección adoptadas por la cadena logística (plantas de impresión, proceso de distribución,etc.) que permite la llegada de la prensa a los domicilios y quioscos.

El virólogo noruego George Lomonossof, uno de los expertos que trabaja en una vacuna en el Centro de Investigación Microbiótica John Innes, refuerza la idea anterior aclarando que "los periódicos son bastante estériles debido a la tinta y la forma en que se imprimen".

En la misma línea se manifiesta la OMS, que afirma que "la probabilidad de que una persona infectada contamine productos comerciales es baja y el riesgo de contraer la COVID-19 por un paquete que se ha movido, viajado y expuesto a diferentes condiciones y temperaturas también es baja".

The New York Times, en un artículo firmado por su editora de Salud, Tara Parker-Pope, que cita a expertos de referencia, destaca que “el riesgo de infectarse por manipular el correo o los paquetes es extremadamente bajo y, en este momento, solo teórico. No hay casos documentados de alguien que haya enfermado por abrir un paquete o leer un periódico”.

La supervivencia, además de los virus en los objetos, no depende solo de la cantidad de patógenos, sino también de factores como la calidad de la superficie, la temperatura, la humedad y la radiación, entre otros.

Más allá de la opinión de los diferentes expertos consultados, la AMI recalca en su nota que el proceso de impresión de los periódicos está completamente automatizado y que la distribución de la prensa escrita se lleva a cabo siempre “con las más estrictas medidas de seguridad”. La cuarentena nos obliga a estar informados y una de las mejores formas de hacerlo es a través del periódico.