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  • Diario Digital | jueves, 25 de abril de 2024
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Refuerzo a la lucha contra el narcotráfico

Refuerzo a la lucha contra el narcotráfico

Muchas veces, los datos estadísticos pueden parecer fríos y ser tomados tan solo como simples números. No obstante, toda información matemática siempre revela situaciones positivas o negativas de diferentes temáticas, que deben ser analizadas para tomar decisiones en diferentes campos. 

El último informe presentado esta semana por la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC) —sobre el decomiso e incineración de drogas durante la última gestión— muestra datos preocupantes que el actual Gobierno debe considerar para asumir acciones inmediatas orientadas a reforzar la lucha contra el narcotráfico, especialmente en el departamento de Cochabamba.

En 2019, la Fuerza Especial de Lucha Contra el Narcotráfico (FELCN) destruyó 841 fabricas de droga en el país, de las cuales 640 estaban en el trópico de Cochabamba, el resto en Santa Cruz, La Paz y Tarija. Esto quiere decir que 8 de cada 10 funcionaron —un tiempo no definido— en el Chapare y quien sabe cuál habrá sido la cantidad de producción. 

UNODC también reveló que el año pasado se incautaron más de 9 toneladas de pasta base, 6 de clorhidrato de cocaína y más de 6 de marihuana. 

Todas estas cifras son indicadores de que la producción y el tráfico de drogas están activos en diferentes lugares de Bolivia y representan una serie de amenazas para la seguridad humana, la economía nacional, para el sistema judicial y la gobernabilidad, porque —según dice UNODC—  socavan la cohesión social e impiden la eficiente inversión de los recursos, obstaculizando el desarrollo social, económico, cultural y político del país.

Por eso es importante que se refuerce la lucha contra el narcotráfico en todo el territorio nacional. No se puede permitir que este mal se extienda en el territorio nacional, ni tampoco que Bolivia se consolide como puente para el tráfico de sustancias controladas a Europa y EEUU.

Ante el riesgo del incremento de esta actividad ilegal y frente a la ausencia de control policial, los ministerios de Gobierno y Defensa deberán acortar los plazos para consolidar el retorno de la Policía a esa zona y comenzar con las tareas de eliminación de la hoja de coca excedentaria en el Chapare. Esto, sin dejar de lado la erradicación de las plantaciones en los parques nacionales donde está prohibida esta actividad.  También es necesario aumentar el resguardo en los puestos fronterizos y reforzar los puntos de control de ingreso a Cochabamba, Santa Cruz y La Paz.