Karina G.R., de 36 años, imputada por el delito de peligro de estrago obtuvo detención domiciliaria tras su audiencia de medidas cautelares, ayer. La mujer fue aprehendida tras que difundiera una noticia falsa, en su Facebook y otras redes sociales, relacionada a un supuesto caso positivo de coronavirus, COVID-19, en el municipio de Cliza. Esa situación provocó pánico y desesperación en los pobladores del Valle Alto, informó el director departamental de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (FELCC), Richard Vargas. 

“No he hecho nada malo. Solo quería (que la población) se cuide”, manifestó la mujer mientras era conducida a celdas policiales a espera de su audiencia de medidas cautelares, la tarde del martes. 

La autoridad policial dijo que la joven argumentó que una profesional de medicina le comunicó de la supuesta existencia de ese paciente positivo a coronavirus y que ella solo publicó en sus redes sociales para alertar y pedir a la población que tome recaudos. Sin embargo, siendo el dato falso la mujer fue imputada por el Ministerio Público.

“Recomendamos a la ciudadanía que se abstenga de difundir información que no está verificada en especial si se trata de temas relacionados al coronavirus porque genera reacciones en la población y pueden ser objetos de procesos penales. La normativa lo contempla así y los que publiquen comunicados falsos serán denunciados”, manifestó.

Este delito es penado con una privación de libertad de uno a cuatro años, de acuerdo con el Código Penal en Bolivia. 

En La Paz, por el mismo delito, un abogado fue imputado y le dieron detención domiciliaria, hace unos días. El hombre difundió un video en redes sociales donde se observó que el personal médico de un Policlínico de la zona de Pura Pura dependientes de la Caja Nacional de Salud (CNS), afirmaban haber derivado un paciente positivo de coronavirus, esa información fue descartada e iniciaron un proceso legal contra el que filmó el video. 

El acusado sostuvo que asistió al centro médico para una consulta odontológica, pero los profesionales se resistieron a atenderlo e inventaron el supuesto caso de coronavirus. Sin embargo, los fiscales consideraron un delito que el hombre haya difundido el video conociendo que la información era falsa. 

Asimismo, el departamento de Cibercrimen de la FELCC de La Paz investiga a un joven que se ofreció como voluntario para ser contagiado con el coronavirus, a través de una grabación que publicó en redes sociales. El hombre sostuvo rechazaría el virus porque se trataría de “un alteño que come chuño.