Por sus venas corre el agua de la natación. Es adrenalina pura y se ha consolidado como una de las promesas deportivas de Cochabamba. La valluna Mariana Bustamante lleva la calidad del deporte acuático por todo su ser.

La atleta sigue el camino de su padre Álvaro (Potrillo) y su hermano, quienes destacaron en torneos nacionales e internacionales. Ella reconoce que ambos fueron su motivación desde los cinco años, edad en la que comenzó a practicar la disciplina.

Le llena el hecho de que la natación es un deporte complejo y que cada día tiene desafíos grandes, en los que ella misma tiene que superarlos.

El estilo mariposa es su apuesta, pues ella destacó en certámenes departamentales y nacionales, logrando medallas y consagrándose campeona.

Le avalan más de 30 campeonatos disputados, así como también en los Juegos Estudiantiles Plurinacionales, donde representa al colegio Anglo Americano.

Actualmente es integrante de la selección cochabambina de natación desde 2017, sobresaliendo.

Su mayor inspiración es la nadadora húngara Katinka Hosszuy y su padre Álvaro Bustamante, quien ha sido y es un nadador reconocido a nivel nacional e internacional.

Mariana se ha trazado un objetivo a mediano plazo, el de ser una nadadora profesional y representar al país en torneos internacionales. Sabe que ese camino será difícil, pero considera que ese es el precio que debe pagar.

Manda un mensaje a la juventud, indicando que “deben seguir” sus sueños” y no abandonar en ningún momento el deporte que les gusta, sea natación u otro.