El incremento exponencial de casos positivos de coronavirus en Cochabamba ha alertado y movilizado al Comité de Operaciones de Emergencia Municipal (COEM), instancia que determinó prohibir la circulación de vehículos y personas los días domingos, entre el 15 y el 31 de enero, con el objetivo de evitar que esta enfermedad se siga expandiendo entre la población.

El COEM, además de restringir las salidas los días domingos, dispuso suspender las visitas a los cementerios, el cierre de mercados zonales, parques recreativos y de piscinas. 

De lunes a sábado, la población podrá movilizarse entre las 05:00 y las 22:00.

Apenas se dio a conocer estas nuevas medidas restrictivas, los usuarios de las redes sociales cuestionaron si las mismas serán suficientes para frenar los casos de COVID-19, o si se tendría que acompañar con acciones más drásticas que eviten, con mayor eficacia, la propagación de este virus.

Prohibir la circulación de personas y vehículos un día a la semana no es suficiente. Esta medida en particular debe ir acompañada de otras acciones como el uso "obligatorio" del barbijo, el lavado constante y consciente de las manos, además de evitar las aglomeraciones.

Si no se cumplen todas estas medidas de bioseguridad, de nada servirá que se prohíba la circulación un día, si el resto de la semana la gente baja la guardia y se expone a situaciones de riesgo.

El transporte y los mercados son sectores claves para evitar o, por el contrario, propagar el virus. Si sigue aconteciendo lo que se ha visto hasta ahora, difícilmente podremos bajar el número de casos.

Los transportistas y los pasajeros deben estar conscientes de que no se puede viajar en vehículos atestados de usuarios, porque en esa situación hay mayor riesgo de contagio por la proximidad de unos a otros.

Asimismo, las personas deben evitar ir a los mercados en grupos, tan solo tendrán que designar a uno para que realice las compras semanales, pero siempre con las medidas de bioseguridad correspondientes.

La lucha contra el coronavirus debe complementarse con un buen sistema de salud. Las autoridades deberán prever espacios adecuados y suficientes para atender a los casos sospechosos y confirmados. Se tendrá que equipar las unidades de terapia intermedia e intensiva, y surtir con medicamentos a los hospitales, además de contratar al personal de salud necesario, entre algunos requisitos indispensables.

Asimismo, está en manos de las autoridades regular el precio de los medicamentos que se expenden en farmacias y los cobros que se realizan en las clínicas privadas.

Si no asumimos estas y otras acciones, el día de mañana podemos estar lamentando la pérdida de seres queridos.

Lo que vivimos a mediados del año pasado, cuando la pandemia en el país estaba en su punto más alto, no puede repetirse.