Los germinados o brotes son la primera etapa de crecimiento de las semillas, muy ricos en minerales, enzimas y oligoelementos que contribuyen al buen funcionamiento del organismo al oxigenar la sangre, ayudar en la digestión y en la renovación celular, según recomienda Stephanie Araujo de Tota Microverdes, tienda de germinados verdes y otros alimentos naturales.

La alta contribución energética de los germinados es de gran importancia, sobre todo en una etapa en la cual el reforzar el sistema inmunológico es prioridad para las familias para prevenir enfermedades.

Elaborarlos en casa es muy fácil y económico, además de que no requiere casi nada de tiempo.

Araujo recomienda usar semillas de cereales y leguminosas. También las oleaginosas son nutritivas, como la semilla de girasol, sésamo y chía. Se debe evitar la semilla de papa, pimentón y tomate debido a que necesitan convertirse en frutos para perder sus antinutrientes.

Los antinutrientes no son dañinos, pero sí pueden perjudicar en la digestión. El beneficio de los terminados es que en el proceso eliminan estos elementos perjudiciales.

Necesitas:
- Un puñado de semillas de tu preferencia (los cereales son los más recomendados)
- Agua
- Bolsa de tocuyo

Pasos:
- Remojar las semillas de 4 a 8 horas
- Enjuagar las semillas y la bolsa de tocuyo
- Ponerlas dentro de la bolsa y colgar en un área ventilada y en la cual no se nos olvide (en la cocina, al lado del lavador, es ideal)
- Enjuagar la bolsita con las semillas de 2 a 3 veces por día
- No dejar que se seque
- Entre 4 a 8 días estará listo para el consumo

Según Araujo, si el germinado pasa más de siete días no existe ningún impedimento para su consumo, pero va adquiriendo un sabor algo amargo mientras más días pasen.

"Son deliciosos. El brote d girasol, por ejemplo, sirve como snack. También se pueden consumir los germinados en jugos, licuados, como topping en las pizza, hot dogs, y adherir a los platos que queramos, incluso en las sopas", recomienda Araujo.