QUITO/EFE

Twitter: Opinion_Bolivia

La muerte de la segunda víctima de la ola de protestas que hasta ayer cumplía su sexto día en Ecuador por las medidas económicas impuestas por el Gobierno, obligó al presidente Lenín Moreno a ordenar un toque de queda  para restringir la libertad de tránsito y movimiento en determinado horario y en áreas aledañas a sedes institucionales e instalaciones estratégicas. 

Desde Guayaquil, Moreno emitió el decreto 888 que estipula la restricción en horario de 20:00 a 5:00, los siete días de la semana, mientras dure el estado de excepción que será de 30 días.

VÍCTIMAS La jornada de ayer se reportó la muerte en un hospital de Marco Oto, de 26 años, que fue herido en una de las protestas que tienen lugar en Quito. El joven quedó presuntamente atrapado junto con otros jóvenes entre una puerta metálica y agentes motorizados en un paso peatonal elevado, según el comunicado de la Comisión Ecuménica de Derechos Humanos (Cedhu). Tratando de escapar de la persecusión policial se presume que él y otra persona cayeron del puente. 

La principal detonante de los paros y disturbios fue la eliminación del subsidio a la gasolina y diésel con el consiguiente encarecimiento de precios. Las manifestaciones son contra las medidas económicas adoptadas en el marco de un acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI). La primera víctima se produjo en una carretera cerca de la ciudad de Cuenca (sur), cuando un hombre de 35 años fue atropellado por un vehículo mientras participaba en otra manifestación violenta.

Se desconoce el número de heridos, pero hasta ayer habían 570 arrestados. 

Al menos 10.000 indígenas llegaron a la ciudad y tomaron la Asamblea Nacional al grito de “¡fuera Moreno!”. Alistan para hoy la marcha hasta el palacio presidencial, que se encuentra desocupado.

Ayer en la tarde, los manifestantes rompieron los diferentes cercos de seguridad y ocuparon la sede de la Asamblea Nacional. Protagonizaron duros enfrentamientos con policías y militares. La Policía motorizada, apoyada por unidades caninas y guardia montada lograron restablecer el orden por algunos minutos con el uso de la fuerza y gases.