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  • Diario Digital | jueves, 28 de marzo de 2024
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Abastoflor y Crespo brillan en el exterior

Abastoflor y Crespo brillan en el exterior

Fabiana Abastoflor es una gimnasta nacional que ha logrado hitos importantes para el deporte nacional en el último tiempo. Compitió en mundiales, torneos continentales y estuvo en los Juegos Suramericanos Cochabamba 2018. A nivel nacional, también fue campeona del torneo Sol de Septiembre en la Llajta, en septiembre de la gestión pasada.

Este año, logró una medalla de oro en la Copa Sudamericana de Clubes de Gimnasia Rítmica, que se desarrolló en Santa Cruz hasta el domingo 30 de junio de este año. Faby logró la presea dorada en las modalidades de Aro, Pelota, Clavas y Cinta.
Su próxima parada será el Campeonato Mundial de su disciplina que tendrá lugar en Bakú, Azerbaiyán, del 16 al 22 de septiembre del año en curso. Tres semanas atrás, durante una entrevista que Abastoflor le concedió a la red nacional Cadena A, el vicepresidente de Bolivia, Álvaro García Linera la “sorprendió” con la noticia de que el Gobierno Central le apoyará en su viaje a tierras europeas a disputar el torneo mundial. Además, tendrá una concentración en Brasil y España antes de encarar la competencia máxima de su deporte.

CRESPO
Nació en Tarata, Cochabamba; pero se vio forzada a emigrar a la Argentina a una temprana edad: cuatro años.
Liz empezó su carrera en el boxeo a los 14 años. Vive, entrena y compite en Puerto Madryn de Argentina tras haber obtenido la nacionalidad del vecino país.
La boliviana-argentina tiene la meta de “seguir creciendo” en el boxeo y aguardará futuras peleas en el “cuadrilátero grande”, que es el MGM Arena de Las Vegas, Estados Unidos, donde peleó a principios de año. Crespo lleva las banderas de ambos países en cada combate.


Crespo fue la primera boliviana-argentina que peleó en el MGM Arena de Las Vegas, EEUU

La pugilista tarateña con nacionalidad argentina, Lizbeth Crespo Castro hizo historia el 15 de junio de este año al convertirse en la primera boxeadora boliviana/argentina que peleó en el coloso MGM Grand Arena de Las Vegas, Estados Unidos, ante la local Mikaela Mayer, en un combate que se desarrolló ante la presencia de 10.000 espectadores aproximadamente en Norteamérica.
Si bien perdió la pelea en los puntos por una apretada decisión unánime (98-92, 99-91 y 100-90), fue una “hermosa experiencia” para Liz, la Leona.
La deportista reside en Puerto Madryn y entrenó en Mar del Plata antes de emprender el viaje hacia Norteamérica. Su rutina habitual son dos horas de trabajo físico y técnico por la mañana, otro turno de 90 minutos al mediodía y una tanda final de dos horas en la noche. Su entrenador y esposo es Alejandro Alberto Quinteros. Liz comenzó su carrera en el pugilismo (amateur) a los 14 años.
Su categoría es 57 kilogramos, peso pluma. Sin embargo, suele luchar en la rama 58 y la pelea ante Mikaela fue en 59.5.
Crespo confía en las repercusiones positivas del espectáculo brindado en Las Vegas para futuras peleas.