Opinión Bolivia

  • Diario Digital | jueves, 28 de marzo de 2024
  • Actualizado 09:52

70% de la población debe vacunarse para terminar con el virus

Se prevé que para el 2021 apenas se alcance el 20%,  por lo que las farmaceúticas siguen en carrera.
Un hombre realiza labores de limpieza en el hospital Escuela Universitario de  Tegucigalpa, Honduras. EFE
Un hombre realiza labores de limpieza en el hospital Escuela Universitario de Tegucigalpa, Honduras. EFE
70% de la población debe vacunarse para terminar con el virus

Si las vacunas contra la COVID-19 que están en última fase de desarrollo son exitosas, aproximadamente un 70% de la población mundial debería inmunizarse para garantizar el fin de la pandemia, calculó ayer la científica jefe de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Soumya Swaminathan.

Aunque queda por ver cuán eficaces serán las futuras vacunas, Swaminathan y la directora del Departamento de Inmunización de la OMS, Kate O'Brien, estiman que ese sería el porcentaje ideal, aunque el objetivo para 2021 es alcanzar el 20%.

"Ninguna compañía de las que están investigando podrá tener de inmediato dosis para todo el mundo", alertó O'Brien, quien indicó que es importante por ello que todos los laboratorios continúen sus investigaciones incluso si uno de ellos se adelanta a los demás.

En un encuentro con internautas para analizar los nuevos y esperanzadores avances en vacunas que esta semana se han reportado en EEUU y Rusia, las dos expertas señalaron que las nuevas tecnologías desarrolladas en la actual lucha anticovid "pueden ayudar a protegernos mejor de futuras pandemias".

Aludían en ese sentido a tecnologías como el ARN Mensajero (ARNm), usado en las candidatas a vacuna de Pfizer-BioNTech y de Moderna, y que en lugar del habitual recurso a formas debilitadas de un virus utiliza moléculas que dan instrucciones al organismo humano sobre cómo construir anticuerpos.

Swaminathan subrayó respecto a las noticias de un 90% de eficacia en los estudios clínicos del proyecto germano-estadounidense Pfizer-BioNTech que se trata de resultados preliminares y "hacen falta más datos" hasta garantizar que puede recibir licencia de producción.

Incluso si las hipotéticas vacunas llegan finalmente a ser disponibles para el gran público, las expertas de la OMS insistieron en que los primeros en ser inmunizados han de ser los trabajadores sanitarios y personas de grupos de riesgo, tales como ancianos o pacientes con determinadas patologías.

O'Brien insistió especialmente en que las primeras vacunas que puedan llegar en unos primeros meses en los que habrá mayor demanda que oferta, no deben almacenarse, y advirtió a los países contra la idea de crear grandes reservas de ellas.

"Lo correcto e inteligente es garantizar que se lleven a quienes más las necesiten", aseguró, añadiendo que en esos primeros momentos "una vacuna en la nevera no va a beneficiar a nadie".

Preguntadas sobre los problemas de distribución que podrían entrañar las vacunas desarrolladas con tecnología ARNm, que requieren estar conservadas a temperaturas próximas a los 80 grados bajo cero, las expertas indicaron que ello supondría un desafío, pero ya hay tecnologías como el llamado "hielo seco" que pueden ayudar. También subrayaron que anteriormente ya ha habido vacunas que requerían almacenamiento a temperaturas tan frías, como la del ébola, por lo que se han probado de forma limitada cadenas de almacenamiento y distribución en algunas partes del mundo.

Más de 200 laboratorios del mundo investigan vacunas contra la COVID-19, una decena se prueban ya en humanos, en algunos casos como China, EEUU, Rusia o Reunido unido los resultados han sido testados en ya decenas de miles y son comparados con la de otros grandes grupos de prueba a los que se ha administrado un placebo.