Las autoridades departamentales constataron ayer que el 30% de los choferes de transporte público y pasajeros de Cochabamba incumple las medidas de bioseguridad establecidas para evitar la propagación del virus.

El director de Servicio Departamental de Salud (SEDES), Yercín Mamani, advirtió que, durante un operativo, evidenciaron que los transportistas están trabajando a más del 75% de su capacidad, poniendo en riesgo la salud de la población y la suya. “Hemos tenido que hacer bajar a algunas personas del vehículo, a pesar de que algunas protestaban”.

Además, identificaron pasajeros con fiebre, a los que se los sometió a una prueba rápida de COVID-19; otro grupo de gente no llevaba barbijo, así que se les entregó uno de manera gratuita.

Desde septiembre de esta gestión, los choferes del servicio público aceptaron trabajar solo al 80% de su capacidad, pero, como algunos no están cumpliendo esta disposición, el SEDES no descarta retomar ciertas restricciones. Una de ellas es que la circulación vehicular solo esté permitida hasta las 20:00 horas y solo de lunes a viernes.

Las autoridades sanitarias prevén controles de este tipo a otros segmentos que retomaron actividades, como el comerciantado, en coordinación con la Policía y la Municipalidad.

CIFRAS

La jornada pasada se reportaron 14 nuevos casos de COVID-19 en Cochabamba, distribuidos en los municipios de Cercado, Sacaba, Tiquipaya, Vinto y Tolata.