El presidente electo y encargado de Venezuela, Nicolás Maduro, amenazó ayer con "radicalizar" la revolución si sigue la violencia, que, aseguró, ya se ha cobrado siete vidas en incidentes durante movilizaciones.

"Si sigue la violencia lo que podemos es radicalizar esta revolución", subrayó Maduro durante un encuentro con directivos de la estatal Petróleos de Venezuela (PDVSA) transmitido en cadena obligatoria de radio y televisión.

Insistió en que está "dispuesto a radicalizar esta revolución, ir a fondo, allí a las causas de la miseria, de la dependencia, de la destrucción económica" y aseguró que cuenta "con el apoyo de un pueblo, de una Fuerza Armada Nacional Bolivariana".

El “heredero” de Hugo Chávez aseguró que le informaron de que "lamentablemente" los "fallecidos van por siete" e indicó que "todo el país sabe quién es responsable de estos muertos" y de ataques a sedes del partido del oficialismo, el Socialista Unido de Venezuela (PSUV) y de centros asistenciales que el Gobierno mantiene con médicos cubanos.

"De estos siete muertos, todo el mundo sabe quién es culpable. Ahora no va a salir a decir yo no fui", insistió el gobernante encargado.

Maduro aludió además a una conversación telefónica con el líder opositor Henrique Capriles, que ya había mencionado el pasado domingo en el discurso que pronunció tras conocer los resultados que le daban el triunfo en las presidenciales.

"Se lo dije: ¿qué, tú vas a mandar a quemar a este país? Yo voy a llamar a la paz, ve a ver qué haces tú", comentó Maduro, quien defendió las elecciones como "transparentes, constitucionales, legítimas, verificadas internacionalmente".

Subrayó que no traicionará al pueblo poniéndose de acuerdo con un "burgués" para "violar los resultados electorales", en una alusión a la petición de Capriles de recontar el cien por cien de los votos, dada la ajustada ventaja entre él y Maduro.