Bonny Lovy, "el productor que canta", vivió un momento emotivo con los privados de libertad de la cárcel de Palmasola, el jueves, ocasión en que aprovechó para motivarlos a salir adelante y dejar el pasado atrás.

La experiencia tuvo de todo en el recinto penitenciario, pues el artista del oriente fue ovacionado por los presos, se sacó fotos con ellos, cantó y también sudó la camiseta celeste que llevaba puesta cuando jugó un partido de fútbol.

Llevó pelotas, dinero, alimentos y tarjetas de crédito para los presidiarios, a quienes les recordó son sus compatriotas, su sangre. "Todo lo bueno que le pase al Bonny lo vamos a repartir para la gente que más lo necesita".

Los presidiarios no solo lo saludaban desde sus lugares conforme el cantante recorría todos los sectores, sino que lo seguían en una suerte de caravana humana. Todos aprovechaban para retratarse.

"Hay que darle las gracias a Diosito, que nos tiene con vida, eso es lo que importa. No me olvido de ustedes. Ya había venido en Navidad. Quiero que sepan que cuanto mejor me vaya, voy a estar aquí más seguido porque ustedes son bolivianos igual que yo, son mis compatriotas, son mi sangre", dijo el artista, que grabó la canción "Ella me persigue", con el grupo colombiano Alkilados.

El Bonny jugó a la pelota. En el medio de la cancha se abrazó fuerte con "El Machete", uno de los privados. Compartió refresco y anotó un hat trick. 

El autor de la frase "pasándola bien, pasándola nice" no le negó un beso en la boca a una de las mujeres que se encontraba en Palmasola. Esto sucedió en el momento en que el cantante ingresaba al recinto. Ella lo divisó, él se acercó para abrazarla y, todo terminó en un beso "robado".