Opinión Bolivia

  • Diario Digital | martes, 23 de abril de 2024
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Consumir lo que producimos

Consumir lo que producimos
Fomentar el consumo de los productos bolivianos es, sin duda, una necesidad urgente en el país. Por muchos factores, entre ellos el precio, los bolivianos prefieren consumir o adquirir productos extranjeros, sin tomar en cuenta que al comprarlos solo favorecen a las empresas internacionales y no a las nacionales.

Ojalá esa preferencia cambie en el mediano plazo si el movimiento “Hecho en Bolivia”, lanzado por el presidente Evo Morales junto a empresarios, microempresarios y artesanos, alcanza los objetivos que se ha trazado.

Uno de los objetivos del movimiento es precisamente concientizar a los bolivianos sobre la importancia de consumir lo nuestro y no lo ajeno, una meta que sin duda no será muy sencilla de alcanzar si los sectores productivos y el gobierno de Morales no fortalecen la alianza que han emprendido.

El consumidor necesita contar con productos de calidad y precio para optar por lo nacional. Asimismo saber que lo que compre es mejor que lo importado, para desterrar la idea que todo aquello hecho en el país no dura o su sabor o modelo no es exquisito ni atractivo.

Es preciso fortalecer a la industria boliviana para que ésta sea mucho más competitiva y atractiva para el consumidor.

El cambio para optar por lo nuestro no será de la noche a la mañana, por eso es importante que las autoridades y los empresarios trabajen arduamente para demostrar que lo se produce en el país vale la pena.

Asimismo, mostrar que al consumir lo nacional se está aportando al crecimiento económico del país, que los beneficios no son solo para el empresario sino para todos los bolivianos. Si la industria crece, el empleo también crece.

El presidente Evo Morales cree que “sin burocracia, sin contrabando y consumiendo lo nuestro” el país podría crecer no al 5 por ciento , sino hasta incluso el 6.5 por ciento .

Tal vez el presidente Morales tenga razón, pero para ello el Estado debe asumir acciones más agresivas y sostenidas en el tiempo.

Recordar que “Hecho en Bolivia” no es reciente. Hace más de una década, industriales cochabambinos impulsaron este movimiento y en el tiempo crearon una fundación para los objetivos que se han retomado.

Si la campaña hubiese sido sostenida y el Gobierno hubiese apoyado en ella, tal vez hoy en día ya tendríamos resultados favorables.