Cada vez falta menos para despedir el 2021. Más allá de la alegría y dicha que sentirán quienes tendrán la oportunidad de compartir esta ocasión con sus seres queridos, vale la pena tomar conciencia sobre la realidad que deben afrontar las familias que tienen un niño con autismo y entender el grave daño que los juegos artificiales les ocasiona.

“Los oídos de estas personas son muy finos, demasiado sensibles, y escuchar un sonido inesperado, como son los fuegos artificiales, les afecta y puede llegar causar daños severos”, indica la psicóloga y especialista en autismo, Yola Lara. 

Es por esta situación que los especialistas recomiendan el uso de pirotecnia no explosiva para acompañar los festejos por el arribo de otro año. 

“La pirotecnia afecta, especialmente, a los niños con condición del espectro autista, que poseen una hipersensibilidad a los sonidos en general. Esto tiene que ver con unas conexiones entre la amígdala y la corteza cerebral que están disfuncionadas y esto hace que frente a mínimas cuestiones sonoras, estos niños las perciban y reaccionen”, explicó la médica psiquiatra Andrea Abadi.

Cabe resaltar que las mascotas sufren también con las fuertes explosiones de petardos y cohetillos. Además, el uso excesivo de los mismos propicia una mayor contaminación del aire, lo cual dificulta el panorama para los pacientes que atraviesan la COVID-19. Asimismo, esto afecta a quienes sufren problemas respiratorios por otras patologías, recuerdan los expertos.

CONSEJOS

Ponerle al niño un casco o tapón cuando le toque enfrentar la calle podrá ser útil en momentos festivos, cuando los fuegos artificiales ganan protagonismo. 

El uso de prendas interiores ajustadas, de modo que el infante tenga la sensación de "presión en el cuerpo" ayudará a que el pequeño disminuya su carga de estrés. También es importante considerar explicarle el contexto, de manera que no se vea sorprendido, de acuerdo con el Servicio de NeuroRehabilitación Pediátrico.

Por otro lado, también es viable que la familia busque lugares ciertamente alejados de los lugares con mayor ruido para pasar las fiestas navideñas, sobre todo cuando se acerque la Nochebuena y Año Nuevo.