Lagunas naturales, cascadas, bosques, el casco viejo sacabeño y sitios históricos son parte de un circuito turístico que se forma por sí solo.

La Villa San Pedro de Sacaba, o solo Sacaba, fusiona la economía local con el turismo y éste es un reto que el municipio emprende para potenciarse. Está situada a unos 12 kilómetros de distancia de la ciudad de Cochabamba.

Es la segunda ciudad con más habitantes en el departamento. En esta urbe viven 172.466 personas, de las cuales 88.436 son mujeres y 84.030 hombres, según el Censo de 2012 del Instituto Nacional de Estadística (INE).



CASCO VIEJO El casco viejo de Sacaba puede recorrerse en poco tiempo. La plaza principal expone el tradicional monumento de caballos, que ya es parte de la identidad de este municipio, una glorieta en medio es un mirador, el templo en el lado norte y el monumento del monseñor Alcócer también son íconos.

El municipio cuenta con varios atractivos. El orden del recorrido depende del lado elegido para visitar. Por la carretera hacia el oriente, en el trayecto puede tener espacios de descanso como la plaza de Villa Obrajes, a pocos kilómetros del centro de Sacaba o se puede hacer una parada más allá, en Tutimayu, para degustar platos típicos en los locales que hay en el lugar. Luego sigue la visita en un recorrido que ofrece paisajes y bosques naturales, entre las montañas.

SAN ISIDRO A 35 kilómetros de la ciudad de Cochabamba y a 23 de Sacaba, a dos kilómetros de la carretera parece que se escondiera la laguna de San Isidro, espacio natural que seduce desde que se deja ver tras la montaña sembrada de eucaliptos.

Con seis metros de profundidad, sus aguas cristalinas, reflejan el cielo y parecen caminar junto a los visitantes en las tardes de brisa.

Su riqueza en fauna incluye en sus aguas peces como el pejerrey dorado.

En el lado oeste se divisa desde lejos un barco hecho de madera y fierro, con gradas que llegan hasta un mirador. Es una representación de barco pirata.

Las áreas recreativas están en perfecto estado y se sitúan en medio de la naturaleza.

La actividad económica local se convierte también en atractivo. En los alrededores de la laguna, los habitantes son agricultores. El arado es activo y, en esta época de inicio del año agrícola, los bueyes caminan en par, los campesinos siembran las semillas de lo que será alimento en unos meses. Hombres y mujeres comparten las labores agrícolas.

Y en las orillas, familias enteras acomodan bolsas con papas para remojarlas, para después secarlas al sol y tener luego el chuño.

Bordeando el lago un letrero de “salida” invita a tomar un nuevo camino, de ripio, que bordea un barranco lleno de vegetación, más eucaliptos que otras especies. Algunos riachuelos cruzan el camino y refrescan la vista. En los canales de riego lavan cebollas frescas y en algunas canchas deportivas aprovechan la tarde para secar el chuño. El viento mece los eucaliptos y se oye como el río.

Este camino termina en Ucuchi, donde otra vez aparece la carretera que de retorno a la ciudad tiene otros caminos para seguir descubriendo los encantos de Sacaba.

El alcalde de Sacaba, Humberto Sánchez, destaca que los atractivos son naturales y que se pueden fortalecer con la economía local de los comunarios que habitan en estas zonas.

Apuntes.

Phaqcha

El alcalde Humberto Sánchez resalta, entre otros, la zona de Phaqcha, en el distrito rural de Chiñata. Las cascadas están a cuatro kilómetros de la comunidad de Molino Blanco; el ingreso es por el cerro. La cascada mide 80 metros de altura. Tiene un microclima húmedo, rodeado de eucaliptos y plantas de atino típicos de la región. Existe una diversidad de nidos de animales como liebres y vizcachas.



Wara Wara

Las cascadas están a unos 14 kilómetros de la carretera principal de Sacaba. Allí hay exuberante flora que varía desde pinos y eucaliptos, hasta helechos y árboles frutales como maracuyá. Se puede apreciar variedad de aves y anfibios únicos. También hay formaciones rocosas en el lado sur de la laguna de Wara Wara, son formaciones naturales singulares muy parecidas a las del valle de la Luna en La Paz y, al ser una zona volcánica, se explica el motivo de sus formas, la piedra calcinada le da un color y textura espacial.

El Morro expone arquitectura e historia del sindicalismo

Balcones y tejas coloniales hacen a una infraestructura colonial republicana. El Morro además es parte de la historia del sindicalismo.

La zona está situada a un kilómetro del casco viejo de Sacaba, al lado norte, como en una colina. La principal construcción es una casa antigua que tiene afuera imágenes de colores y escritos de sublevación, donde todavía se expone el nombre de la Central Única de Trabajadores Campesinos fundada en 1966.

Conforme a la información otorgada por la Alcaldía de Sacaba es una edificación arquitectónica que data de principios del siglo XX. La Central Campesina el Morro es considerada como el punto estratégico de reunión de los movimientos sociales y milicias armadas revolucionarias de todo el valle y trópico de Cochabamba, que lucharon por la consolidación de la democracia y la reivindicación de los derechos de uso de tierra de los campesinos.

El año 2011, mediante ordenanza municipal, la casona fue declarada como Patrimonio Histórico-Cultural del municipio de Sacaba.

Al lado está el mercado de El Morro, donde se vende productos como la papa que llega desde los distritos rurales de Larati, Lava Lava, Chiñata, Aguirre y Palca. Las ferias se realizan principalmente los fines de semana.

En este barrio la mayoría de los negocios, librerías, pensiones y otros tienen como nombre “El Morro”.

El alcalde de Sacaba, Humberto Sánchez, destaca la tradición histórica del lugar, que abarca pocos manzanos.

“Se puede decir que era un cuartel de los hermanos campesinos orgánicos, donde se capacitaban líderes dirigentes con una visión de liderazgo orgánico para mantener la unidad, para recuperar los valores del sindicalismo”, narra Sánchez.

La autoridad reconoce que, con el paso del tiempo, estos valores se han distorsionado y la central campesina no tiene la misma fuerza que antes.

“Queremos recuperar, restaurar esa sede sindical para convertirla en un museo”, afirma, al referirse a que será un espacio en el que se exponga herramientas y mecanismos para la siembra.

Anuncian nuevas inversiones para potenciarse en 2016

LIMBERT CÉSPEDES

PDTE. CONCEJO SACABA

Los habitantes sacabeños buscan potenciar su actividad turística con mayores inversiones en el próximo año 2016.

El presidente del Concejo Municipal de Sacaba, Limbert Céspedes, destaca los atractivos turísticos de su municipio y anuncia inversiones en favor de la concreción de circuitos que incluyen la práctica deportiva.



P: ¿Qué es lo más atractivo que tiene Sacaba?

R: Sacaba tiene los tres pisos ecológicos, desde la parte del trópico, los valles y la parte de la serranía. Lo más interesante que hay es San Isidro en lo turístico, está Phaqcha que aún no tiene un ingreso muy interesante en este momento, pero poco a poco ya lo vamos a ir implementando. La gastronomía también es importante rescatar. Otros sectores interesantes son donde hemos recibido el año nuevo andino, el sector de Khorihuma, en el sector del trópico está Yanagaga, sectores muy interesantes para nosotros.

P: ¿Hay acceso a esos lugares?

R: El tema del acceso hace mucho. El día 3 de julio vamos a encaminarnos allá para ver cuánto hemos avanzado en el tema de accesos. Queremos hacer un circuito de bicimontaña que es muy interesante. Hemos estado hace tres semanas atrás allá y nos ha parecido muy interesante hacer circuitos turísticos.



P: ¿Cuánto falta potenciar para tener un circuito turístico consolidado en Sacaba?

R: Son inversiones que las vamos a ir haciendo en esta gestión, cosa de que el 2016 ya podamos potenciar este tema, teniendo guías turísticos que puedan conducir a la gente hasta allá e implementar el circuito.



P: ¿Hay mucho turismo por explotar?

R: Demasiado turismo por explotar en Sacaba. Para llegar a potenciar a esa altura el sitio de San Isidro se requiere de una inversión de casi 3 millones de bolivianos. Creemos que una inversión similar en Molino Blanco, en Phaqcha, es suficiente para que tengamos en ese sector un atractivo turístico potencial a nivel de Sacaba. Después están los circuitos de bicimontaña que demandarán una inversión de 5 millones de bolivianos, con lo que tendríamos en perfectas condiciones para la bicimontaña.