Si bien los besos y las relaciones sexuales fuera de la pareja son considerados engaño por casi el 100% de los hombres y las mujeres, todo lo que ocurre antes de cruzar esos límites se presta a la confusión.

En diálogo con Infobae, Diego Luparello, psicoanalista y expresidente del Claustro de analistas en formación de la Asociación Psicoanalítica Argentina (APA), explicó: "Solemos estar de acuerdo en que una relación sexual extramatrimonial constituye un engaño. Sin embargo, en ese consenso restringimos lo sexual al acto genital y dejamos por fuera toda la dimensión de las fantasías sexuales".

Ahí entra en juego el micro-engaño, una nueva forma de traicionar a la pareja. La lujuria y el deseo son eternos, y la vida moderna facilita esta situación.

"El micro-engaño engloba una serie de actividades, muchas veces asociadas a las redes sociales, que generan excitación sexual, donde el otro miembro de la pareja queda excluido", detalló Lucila Martín Moreyra, sexóloga clínica.

A veces las relaciones pueden volverse rutinarias y aburridas. Entonces, estar activos en las redes sociales aparece como una gran opción para “no perderse de lo mejor de la soltería”.

“Antes, cortábamos una relación y no sabíamos de la vida de nuestra expareja hasta encontrarla un buen día, por casualidad —si es que eso ocurría—. Hoy sus noticias están al alcance del clic del mouse”, explica Valeria Schapira, experta en relaciones de match.com.

En ese sentido, una encuesta de ese portal de citas reveló que el 48% de las personas cree que las redes sociales pueden arruinar una pareja, siendo mayor la proporción de hombres (65%) que la de mujeres (35%), quienes lo perciben de esa manera.

Pero también está la manera de descubrir al infiel. Existen algunas señales:

1. Excesivo celo de sus redes sociales Quien nada hace, nada teme, por lo que una persona transparente no tendrá problemas de dejar abiertas sus redes sociales, teléfono o computadora.

2. Mantiene “flirteos” virtuales 

La mayoría de quienes realizan esta práctica cree que “es un juego” porque no existe una consumación real y, por ende, no se le hace daño a nadie. Pero, estas conductas son profundamente dolorosas para las víctimas y causan ilusiones en terceros que pueden desconocer el real estado sentimental del seductor virtual.

3. Borra todo 

A menos que él/ella sea obsesivo, pocos borran su historial de búsqueda, los mensajes de Whatsapp y las fotos de los teléfonos u otros aparatos móviles.

4. Se ofende 

No se trata de conocer todas las claves de la pareja. El punto crítico es cuando él o ella parece ofenderse cada vez que se le pregunta por un mensaje recibido o algún contacto.