Opinión Bolivia

  • Diario Digital | viernes, 19 de abril de 2024
  • Actualizado 13:26

Lenka Nemer: el rostro de Bolivia en el Miss Universo

Es una de las favoritas de los missólogos de todo el mundo para conquistar la corona máxima. Se declara feminista y busca dejar huella por sus proyectos sociales. 

Lenka Nemer- el rostro de Bolivia en el Miss Universo. MARCO VELASCO-REYNALDO SOLÍS-SERGIO CHUQUIMIA
Lenka Nemer: el rostro de Bolivia en el Miss Universo. MARCO VELASCO-REYNALDO SOLÍS-SERGIO CHUQUIMIA
Lenka Nemer: el rostro de Bolivia en el Miss Universo

Desde que obtuvo la corona máxima de belleza nacional, Lenka Nemer Drpic se trazó un objetivo claro: ser una Miss que rompa los estereotipos de los reinados, que marque su propia huella por sus proyectos sociales más allá de su hermosura y que le dé el primer título universal de belleza a Bolivia. Según muchos missólogos internacionales expertos en concursos, es una de las favoritas para ganar el Miss Universo y hacer historia. 

Lenka es feminista, defensora de los derechos humanos y de la comunidad LGBTIQ+, maestra de inglés, actriz, música, pero, sobre todo, una amante de la cultura boliviana que encontró en el mundo de la belleza y el espectáculo su ventana para generar incidencia y aportar al planeta en luchas diversas, como la erradicación del hambre, el cuidado del planeta y la defensa de la justicia. 

La paceña, de 24 años, se define como la “antítesis” del estereotipo de reina de belleza, alguien a quien le cuesta usar tacones o maquillarse y que prefiere hablar sobre feminismos (así, en plural), derechos, violencia o medioambiente. Hoy, es el rostro de Bolivia en Florida, Estados Unidos, en la versión 70 del Miss Universo, una edición compleja por la situación de pandemia que vive el mundo. La transmisión en Bolivia será por la red nacional ATB, a las 20:00. La presentadora de Contame, Sandra Coscio, mostrará el paso a paso del concurso y la presencia boliviana en el país del norte. 

Estas dos semanas previas, Lenka lució varios trajes de distintos diseñadores bolivianos en la antesala al concurso. El vestido final aún continúa en incógnita, pero uno de los trajes que se ganó la simpatía y el orgullo de los bolivianos es el atuendo típico, denominado La Fuerza de Los Andes y que representa el baile waca tokori; las más de 40 polleras, el corsé y la capa están hechos por mujeres bolivianas y bordados a mano con tejidos de la comunidad indígena Huari. 

Antes de partir a Estados Unidos, Promociones Gloria compartió un video de la familia de Nemer en el cual le deseaban éxitos para este concurso. “Que siempre estés bien, que te vaya bien en todo lo que hagas, especialmente ahora en el Miss Universo, que signifique para ti un triunfo más en tu vida y que todos tus ideales vayan de la mano”, afirmó su papá.

De hecho, esos ideales que resalta su progenitor se han puesto en escena desde el primer día que llegó al hotel. “Esta tenía que ser una elección para poder visibilizar la lucha por los derechos humanos, especialmente por el colectivo LGBTIQ+. Quiero que se sepa que los derechos humanos son irrenunciables e innegociables, ningún ser humano merece ser tratado como un ciudadano de segunda”, dijo la paceña. 

LA PACEÑA QUE ROMPIÓ LA HEGEMONÍA CRUCEÑA

Lenka hizo historia desde que logró el título nacional ya que le devolvió la corona a La Paz des-pués de 35 años, rompiendo así la hegemonía cruceña del Miss Bolivia, un hito que conquistó con una belleza integral, que combina con su preparación física y profesional.

Estudió Relaciones Internacionales en la Universidad Tecnológica Privada de Santa Cruz (Utepsa) gracias a una beca por sus buenas calificaciones. Además, antes de la pandemia, era presentadora de televisión, profesora de inglés en el Centro Boliviano Americano (CBA) y pasaba clases de francés. 

Es hija de José Alfredo Nemer, de origen libanés, y de Victoria Lenka Drpic, de ascendencia croata. Tiene dos hermanas mayores.

La representante de belleza cuenta que sus padres se divorciaron cuando ella tenía tres años, entonces se fue con su mamá a Santa Cruz durante un periodo corto, hasta que quiso volver a La Paz porque extrañaba a su papá. “El vínculo que tengo con él es único. Mi padre es la figura en mi vida, lo es todo”, contó a OPINIÓN.  

Luego de salir bachiller, estudió actuación profesional en Buenos Aires y producción de moda con los organizadores de Argentina Fashion Week. 

Sus amigos la conocen como la “mil oficios” porque siempre está haciendo algo, es muy activa. Divide su tiempo entre sus estudios (de profesión, idioma, violín y canto) y sus actividades favoritas, como enseñar.

Uno de los momentos más difíciles de su vida fue cuando a su papá le dio dos embolias en menos de un mes, lo que lo dejó paralítico un tiempo. “Toda nuestra construcción de vida se cayó, él siempre era la cabeza de la casa, y verlo postrado en cama era doloroso. Es una herida que hasta ahora me hace llorar. Lo que rescato es que mi padre me ha enseñado a ser fuerte y a que todo se supera”, afirmó.

De hecho, en una entrevista a Red Uno, contó que su familia pasó un momento muy complicado a nivel económico luego del problema de su  papá, ya que se quedó sin empleo y él era el sostén del hogar. “Como terapia, mi papá empezó a cultivar en el jardín, entonces, en casa se comía lo que se plantaba”. Eso le quedó tan marcado que, cuando pudo independizarse, empezó a plantar y hacer huertos urbanos en su casa, luego impulsó a que lo hagan sus vecinos y ahora es uno de sus proyectos más importantes como reina de belleza. 

Todas sus experiencias previas, malas y buenas, la convirtieron en la mujer de ahora, que está a un paso de ser la nueva Miss Universo o, en todo caso, mostrar lo mejor de Bolivia.