Opinión Bolivia

  • Diario Digital | miércoles, 24 de abril de 2024
  • Actualizado 18:15

La difícil situación para emprendedores en Bolivia

Cochabamba ocupa el primer lugar en creci-miento de comercio y número de empresas. Sin embargo, establecer una organización tarda más de 1.000 horas repartidas en 14 pasos.   

La difícil situación para emprendedores en Bolivia

Hasta julio del 2019, según Fundaempresa, Bolivia tenía 322.825 empresas legalmente establecidas repartidas alrededor del país, número que representa un 4.11% superior al año anterior. 

Si bien el crecimiento mencionado suena alentador, el indicador muestra una tendencia menos preocupante, después del 7% registrado en 2018. Dicha caída está liderada por el departamento de Cochabamba, que pasó de tener un aumento de 7.12% a 3.22% en tan solo un año. 

El crecimiento disgregado por departamento se ve liderado por Potosí con un 5.12%; Santa Cruz con 5.01%; Beni con 4.41%; La Paz con 4.09%; Pando con 3.93%; Oruro con 3.49%; Cochabamba con 3.22%; Chuquisaca con 2.98% y Tarija con 2.78%.

Basándonos solo en el eje central del país y sus principales ciudades, Santa Cruz es el líder con su capital y Montero; seguido de La Paz con las ciudades de El Alto y Nuestra Señora de La Paz, y, por último, Cochabamba con la capital del mismo nombre, Quillacollo y Sacaba. Todas las ciudades mencionadas acumulan más del 77% de la base empresarial de país.

El sector de mayor participación en el mercado boliviano es el comercio por mayor y menor con un 35.15% el año 2019, seguido de la construcción (12.97%) y la industria manufacturera (10.76%). Para sorpresa de muchos, el departamento con mayor presencia en el primer y último rubro es Cochabamba.

Un factor importante a denotar del  comercio mayorista y minorista es que, además de tener la mayor participación, también tiene el mejor crecimiento en el país, y a grandes pasos, ya que el año 2019, al igual que los años anteriores, el 90% de las empresas creadas fueron de este tipo. 

Entrando al ámbito de la tecnología, el cual representa un 5% de la base empresarial del país, el departamento que lidera tanto en crecimiento como en número de empresas también es Cochabamba, ya  que tan solo en un año se generan 3.000 fuentes de trabajo en 120 organizaciones nacientes.

A pesar de ser un área de alto crecimiento, la inversión que se tiene, según el Desafío AHCIET (Asociación Hispanoamericana de Centros de Investigación y Empresas de Telecomunicaciones) 2020, está entre los menores de la región, ya que nos encontramos con 730 mil dólares solo por encima de Paraguay ($us 396 mil) y Uruguay ($us 302 mil). Los países que invierten más en el sector        de Tecnología, Información   y Comunicación (TIC) son Brasil con $us 24.456.000; México con $us 9.835.000 y Colombia con $us 4.012.000. Esta diferencia se origina por el incentivo a la inversión extranjera y políticas de protección al inversionista que se da en los países líderes.

Tanto en Brasil, como en Colombia y México, además de tener zonas francas como en Bolivia, se establecieron incentivos de inversión a I+D+I (Investigación Desarrollo e Innovación) como descuentos en impuestos de renta (el equivalente al Impuesto a las Utilidades de las Empresas I.U.E. en Bolivia) o atenciones gratuitas brindadas por entidades estatales que ayudan a establecer empresas nuevas en el país, facilitándoles el proceso de instalación, organización y reclutamiento. 

Mientras que en Bolivia tan solo el hecho de establecer de manera legal una empresa dura más de mil horas repartidas en 14 pasos, según Ronal Nostas, presidente de la Confederación de Empresarios Privados de Bolivia.

La inversión, sobre todo en el sector TIC, es un factor potenciador de economías que debe ser apoyado y explotado por los gobiernos y Bolivia no puede ser la excepción.  l