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  • Diario Digital | jueves, 25 de abril de 2024
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Sobreviviente: Jhonatan llega a la Llajta por atención médica

El joven que resistió 31 días en la selva, rodeado de depredadores, debe pasar por un proceso de desintoxicación debido a las picaduras en su cuerpo. Tiene anemia y problemas renales. 
Jhonatan Acosta junto a su hermana. FAMILIA ACOSTA ABUID
Jhonatan Acosta junto a su hermana. FAMILIA ACOSTA ABUID
Sobreviviente: Jhonatan llega a la Llajta por atención médica

Jhonatan Luiz Acosta Abuid, el hombre que sobrevivió 31 días en la selva de Baures, Beni, arribó este lunes a Cochabamba por atención médica. El joven, de 30 años, sufrió picaduras en todo su cuerpo, por lo que debe atravesar por un proceso de desintoxicación. También tiene problemas renales, retención de líquidos y anemia. Perdió 17 kilos. 

Jhonatan, junto a su familia, llegó a Cochabamba. Dijo que tiene dos gusanos en la piel que deben ser extraídos. Perdió una uña del dedo del pie y debe someterse a varios exámenes para recuperar su salud. Se encuentra estable, pero necesita tratamiento médico. “No he eliminado todas las toxinas de mi cuerpo. Tengo muchos venenos y no sé cómo tratarlos y, por esa cuestión, hemos llegado a Cochabamba para saber cuál es el siguiente paso”. 

Tras su rescate, Jhonatan fue ingresado al Hospital Hugo Banzer de Baures, de primer nivel, pero no cuenta con las especialidades necesarias para su tratamiento y, por ese motivo, se trasladó hasta Cochabamba, donde su hermano y otros familiares viven desde hace muchos años.

RESCATE “MILAGRO”

Cuando Jhonatan se internó en la selva de Baures, municipio beniano conocido como la capital del chocolate silvestre, nunca imagino que quedaría atrapado durante 31 días. Con agua de lluvia, comiendo gusanos y gargatea y rodeado de jaguares, cerdos salvajes y otros animales, el joven cochabambino sobrevivió en la Amazonía boliviana.

Todo comenzó el 25 de enero. Jhonatan y sus cuatro amigos salieron a cazar en la selva de Baures, donde mucha gente vive de la caza. Los jóvenes que se habían situado en distintos sitios para aguardar a sus presas acordaron reencontrarse al atardecer, pero Acosta Abuid no llegó al punto de encuentro. Solo cuatro hombres volvieron al pueblo y alertaron a las autoridades sobre la desaparición. 

En medio de la selva, el joven le rezaba y cantaba a Dios. Le concedió lo que pidió; lluvia por 15 días, protección, fuerzas y una nueva oportunidad.

Le prometió a Dios usar su talento para él. “Le hice una promesa a Dios y no pienso dejarla a un lado. Vamos a retomar el camino. Yo canto y toco guitarra, pero todo este tiempo he estado haciendo música mundana. Entonces, le decía allá (en la selva) voy a hacer música para ti”.

Y, cuando todo parecía perdido, Jhonatan fue encontrado el sábado 25 de febrero, al promediar las 15:00. La gente de Baures lo recibió con aplausos, petardos y bandas. Celebraron su vida. Su familia agradeció a todas las personas que les tendieron una mano durante los 31 días.