“Siete personas, cuatro varones y tres mujeres, me estaban mirando del frente el día de la audiencia. Temo que me hagan algo porque denuncié a esa mujer que me robó mi bolso y que logré recuperar forcejeando. Solo estoy con mi hijo y trabajo para ganarme el pan del día, es una pena que la Justicia la haya soltado siendo que tiene antecedentes y ahora me ponen en riesgo”, manifestó la comerciante, que formalizó la demanda ante la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (FELCC) de Punata, tras conocer el fallo judicial.

La víctima dijo que le notificaron una hora antes de la audiencia, pero al ver que los cómplices de la denunciada la estaban vigilando prefirió no presentarse por temor a represalias.

Los vendedores presumen que la acusada envió a su gente para amedrentar a la denunciante, pero advirtieron que la próxima vez que identifiquen a un delincuente van a quemarlo.

ANTECEDENTES

Según la denuncia, la mujer fue sorprendida robando un bolso con tres mil bolivianos. Los comerciantes la atraparon, le ataron las manos, le cortaron el cabello, le rociaron alcohol y le prendieron fuego en los zapatos provocándole quemaduras leves en las piernas, debajo de las rodillas.

Ella admitió que se dedica a robar y un juez le otorgó libertad con arraigo, fianza de dos mil bolivianos y presentación semanal.