El Tribunal de Sentencia No. 2 de Quillacollo rechazó ayer la cesación de la detención preventiva de Jhasmani T.L., conocido como el ‘abogado torturador o del diablo’, en el caso Mecánico. Ese es el único proceso que mantiene al imputado con esa medida cautelar.

De acuerdo con fuentes allegadas a la investigación, el riesgo procesal que persiste, en este caso, es el “riesgo efectivo para la víctima” considerado en el artículo 234 del Código Penal. Jhasmani T. apeló la determinación de la jueza y será una sala penal quien resuelva ese recurso.

Este caso se destapó a denuncia de Juan Antonio Cuéllar, un mecánico que tiene su taller en Tiquipaya. Él no ha dejado de temblar desde que la desgracia tocó a su puerta, el 16 de marzo de 2018, cuando fue secuestrado y torturado. La víctima denunció, hace unos días, que continúa recibiendo amenazas de la gente vinculada a Jhasmani y pidió “justicia y garantías” a las autoridades para evitar que el imputado salga de prisión, y atente contra su integridad, de su familia y de otras víctimas.

El mecánico fue torturado para obligarlo a firmar unos papeles en los que admitió que le devolvieron 20 mil dólares de un anticrético, sin que haya recibido el dinero. Cuéllar indicó que tiene problemas auditivos como consecuencia de los golpes que recibió en aquella oportunidad, hace más de dos años.

Jhasmani T. es investigado en cinco procesos; en tres obtuvo detención domiciliaria, uno no continuó porque la víctima no quiso seguir el caso y este donde tiene detención preventiva.

CASOS De acuerdo con fuentes allegadas a la investigación, el imputado tiene detención domiciliaria en el caso del padrastro, donde Julián T. fue golpeado y obligado a firmar documentos en febrero de 2017, argumentando problemas de salud. El Ministerio Público apeló esa resolución y pasó a los ahora exvocales Nelson P. y Anawela T. que confirmaron su detención domiciliaria. Más adelante, ambas autoridades fueron vinculadas al caso consorcio por la emisión de un auto de vista favoreciendo en el caso hermanos Adriazola.

En el caso videos uno, donde el acusado golpea a una persona, salió la cesación a la detención preventiva y le dieron detención domiciliaria, hace más de dos meses. En tanto, en el caso videos dos, la víctima no quiso seguir con el proceso.

Asimismo, un Tribunal declaró procedente el mandamiento de libertad en favor de Jhasmani, hace casi dos semanas, por el caso investigado como consorcio de jueces, fiscales y policías. Le dieron detención domiciliaria con custodio policial.

El caso del mecánico es el único proceso que lo mantiene con detención preventiva y ya se encuentra con acusación. En este proceso tres personas se sometieron a un proceso abreviado y unas siete u ocho son parte de la resolución de acusación con miras a un juicio oral.

El 26 de agosto, el director del hospital Viedma, Chistian Gómez, señaló que Jhasmani dio positivo a COVID-19, pero que se encontraba estable. Le dieron su alta médica y le recomendaron aislamiento domiciliario. Sin embargo, siendo un privado de libertad tendría que ser trasladado al centro para internos que se contagiaron con el virus y posteriormente a la cárcel de San Sebastián, donde deberá cumplir la medida.