El Ministro de Justicia, Iván Lima, se comunicó este viernes con el mecánico Juan Antonio Cuéllar para hacerle conocer que hará seguimiento a su caso. Cuéllar es una de las víctimas de Jhasmani T., conocido como el “abogado torturador o del diablo” y peregrina por justicia desde hace más de dos años, cuando fue torturado, secuestrado y obligado a firmar unos papeles.

El Ministro de Justicia sostuvo una comunicación telefónica con la víctima.

- “¿Cómo está?, buenos días, le habla Iván Lima, ministro de Justicia. He escuchado su mensaje ayer (donde pedía ayuda de las autoridades). Quiero que sepa que el Gobierno no permitirá ningún tipo de vulneración a los derechos constituidos y vamos a comprometer todos los esfuerzos desde las instancias del orden público para brindar seguridad a usted y su familia”.

La autoridad supo que el “abogado torturador” fue beneficiado con detención domiciliaria y que eso angustia al mecánico debido a que teme por su vida y la de su familia. También pidió que las autoridades de Gobierno sigan su proceso para que haya justicia.

Ante esa situación, Lima señaló que hará seguimiento a su caso a través del Servicio Plurinacional de Asistencia a la Víctima (Sepdavi) ya que la abogada de la parte acusadora pertenece a esa dependencia del Estado. Asimismo, añadió que representantes del Ministerio se harán presentes en la audiencia de apelación que se realizará en Cochabamba, la próxima semana.

“Tengo un equipo nacional, el Ministerio de Justicia tiene oficinas de representación (…) y justamente la próxima semana hay una apelación del caso Torrico, en la que los vocales tienen que dar la talla de la Justicia”, manifestó.

Lima añadió que se debe desterrar la lógica de que el más fuerte gana a través de la fuerza y rechazó que una persona sufra la violencia de la que fue víctima Cuéllar. “Nos hemos acostumbrado a una normalidad de injusticia o como en el caso Torrico, a la lógica de la ‘ley de la selva’”, lamentó en entrevista con OPINIÓN.

Al respecto, el mecánico agradeció la predisposición y compromiso de Lima. “(El Ministro) se ha comprometido a hacer un seguimiento a mi caso y me ha dicho que va a hablar con mi abogada para que haya un poco más de seguridad (…). Va a pedir un informe de la abogada del Sepdavi y yo también he pedido seguimiento a la jueza que está atendiendo y me dijo ‘vamos a hacer un seguimiento a todo su caso don Juan’, me ha dicho”.

Lamentó que debido a las amenazas que se registran no hay abogados que quieran llevar su proceso y develó inclusive que la abogada del Sepdavi y la fiscal asignada al caso ya recibieron advertencias.

Además, dijo que continúa siendo amenazado por gente cercana al “abogado torturador”. También sus testigos atraviesan esa situación y algunos no quieren presentarse más en las audiencias por temor a represalias. 

Cuéllar indicó que los jueces del Juzgado Segundo de Sentencia de Quillacollo, Salomé Guzmán y Richard Cruz, son los que beneficiaron con detención domiciliaria a Jhasmani T., cuando “hay tantas pruebas”. La Fiscalía apeló esa resolución y prevén que se revoque la medida sustitutiva y continúe con detención preventiva mientras se desarrolla el juicio oral por el “caso mecánico”.

El ministro de Justicia apuntó que se podría tomar meses para ir a una reforma, pero remarcó que casos como el de Juan Cuéllar lo impulsan a trabajar por una transformación “urgente”.

ANTECEDENTES

Cuéllar fue secuestrado, torturado y obligado a firmar papeles el 16 de marzo de 2018. El mecánico tomó un inmueble en anticrético por 20 mil dólares y cuando se cumplió el contrato pidió a los dueños que le devolvieran el dinero ganado en varios años de trabajo.

Por eso, lo secuestraron y obligaron a firmar documentos para simular la devolución de la plata. Le tomaron fotos contando billetes, pero no le dieron ni un dólar. Jhasmani T. y su gente le hicieron toques eléctricos, le sumergieron la cabeza en un bañado con agua y lo golpearon.