“No falleció, lo mataron. No hubo pelea, lo emboscaron. No fue una desgracia, fue un crimen. Justicia para Nano”, decían los carteles que sostenían ayer amigos y familiares de Fernando Luis Magne M. en puertas del Juzgado de Oruro. El joven, de 23 años, fue arrollado por su exsuegro la tarde de lunes. Los parientes piden que la investigación se amplíe a la expareja y a la hermana de ella porque también estuvieron en el vehículo y habrían golpeado a la víctima antes de su deceso.

El fiscal de materia Alexander Casanova, en una entrevista difundida por radio Fides Oruro, señaló que el conductor de la camioneta (exsuegro de la víctima) fue enviado con detención preventiva al penal San Pedro por seis meses, etapa investigativa, por el delito de homicidio.

El caso inicialmente fue calificado como homicidio y lesiones graves y gravísimas en accidente de tránsito, pero por los elementos probatorios cambió la tipificación de manera provisional.

Casanova dijo que conocieron que hubo un altercado entre la víctima, el imputado y dos mujeres (la expareja de Fernando y la hermana de ella). Aclaró que el joven no fue apuñalado como decían algunas personas e indicó que tenía heridas en el abdomen a consecuencia del atropello, de acuerdo con la autopsia.

Vecinos de la zona donde ocurrió el hecho, calles 6 de Octubre y Beni, dijeron que el joven fue arrollado y que después dos personas (el exsuegro y la expareja) descendieron de la movilidad y continuaron golpeándolo pese a sus graves heridas. Fernando dejó en la orfandad a una niña que procreó con su exesposa, la misma que lo habría agredido antes de su muerte.