El Ministerio Público, la Defensoría del Pueblo y el Juzgado de la niñez y adolescencia de Pando solicitaron al principal nosocomio de Cobija realizar la interrupción del embarazo de una menor de 11 años. La niña resultó embarazada a consecuencia de que, en reiteradas ocasiones, fue víctima de violación.
A principios de marzo, el Servicio Departamental de Gestión Social (Sedeges) y la Defensoría del Pueblo de Cobija denunciaron que una niña de 11 de la localidad de San Lorenzo resultó embarazada debido a que, en reiteradas ocasiones, fue violada sexualmente de parte de un joven de 22 años.
En aquella ocasión, la menor se encontraba en su establecimiento educativo realizando ejercicios y se desmayó inesperadamente, por lo cual la trasladaron a un centro de salud donde los médicos, luego de realizar la valoración correspondiente, determinaron que la niña tenía 14 semanas de gestación.
"La niña fue internada en el hospital para ser intervenida con autorización de su madre que recibió orientación sobre el contenido de la sentencia porque, en principio, estaba atemorizada por autorizar la interrupción del embarazo", informó la defensora del Pueblo de Cobija, Nancy Texeiros.
La Defensora del Pueblo explicó que como institución involucrada en este caso realizó las acciones para que la niña pueda ejercer sus derechos reproductivos y recibir apoyo psicológico al igual que su madre.
Tras la intervención quirúrgica, la mañana de este lunes, la niña fue dada de alta y se encuentra en fase de recuperación en el servicio Sedeges, según informó Texeiros.
La interrupción se hizo gracias a que en artículo 266 del Código Penal Boliviano establece que dos causales de aborto no estàn penados: "delito de violación, rapto no seguido de matrimonio, estupro o incesto" o "para evitar un peligro para la vida o la salud de la madre".
El acusado de este hecho, quien está actualmente detenido, era reincidente ya que habría cometido un similar hecho, pero gozaba de libertad, según un reporte previo de radio Fides.