El viceministro de Régimen Interior y Policía, Javier Issa, indicó hoy martes que cualquier oficial que cometa actos de violencia será dado de baja "definitivamente", después de la condena de 30 años de prisión que recibió el exteniente Adán Boris por el feminicidio de Betsabé Alacia, a quien se lo expulsará "sin retorno" de las fuerzas del orden.

"Será un acto formal en el que el exteniente será expulsado definitivamente de la institución. Cualquier funcionario policial que cometa algún acto violento será dado de baja directamente sin derecho alguno al regreso", indicó la autoridad en una entrevista con radio San Simón.

Issa entregó insumos de bioseguridad a los oficiales para coadyuvar en su pelea contra el COVID-19. “La Policía boliviana es la institución que está al frente de la lucha contra el coronavirus. Tiene que estar bien protegida y queremos darle protección”.