Personal de inteligencia identificó a 25 miembros de los grupos brasileños Primer Comando Capital (PCC) y Comando Vermelho en distintas cárceles bolivianas, tras una investigación a causa de la explosión de una granada en el recinto penitenciario de Mocoví en el departamento del Beni, en febrero.

El viceministro de Régimen Interior, Javier Issa, informó acerca de la presencia de estos brasileños en las cárceles bolivianas y alertó sobre el alto grado de violencia que los mismos ocasionan en el sistema penitenciario del país, en una entrevista con el programa radial Contacto OPINIÓN.

“Hay una guerra en Brasil por el cotrol de las drogas, y  la han trasladado a nuestros penales. El 99% de los privados de libertad brasileños en nuestras cárceles han sido detenidos por delitos de narcotráfico”, aseveró.

Asimismo, indicó que ambos grupos estarían reclutando soldados bolivianos para ejercer actos de violencia.

Entre las medidas de seguridad proyectadas en torno a este tema, Issa informó que estos reos serán separados en distintas cárceles del país y aquellos que tengan sentencia ejecutoriada, seis de ellos, serán repatriados.

También detalló que se prevé la compra de escáneres de alta tecnología para el ingreso a los penales.

“La infraestructura es el principal problema. Todo el mundo entra a la cárcel. Hay hacinamiento. Y  hemos visto la posibilidad de construir nuevos recintos penitenciarios”, agregó.

Manifestó que muchos de los equipos ya adquiridos para el incremento de la seguridad en los recintos penitenciarios no son adecuados para la geografía nacional, por lo que no fueron puestos en funcionamiento aún, como las manillas electrónicas.

Entre otros temas, la autoridad se refirió al caso de Elba Terán, indicando que la misma, que fue aprehendida con una identificación falsa, tendría al menos ocho bienes registrados con esa identidad falsificada.

Manifestó que uno de los cuestionamientos más importantes en las investigaciones de este caso por narcotráfico, es que se haya otorgado detención domiciliaria y medidas sustitutivas a las hermanas Terán habiendo elementos suficientes que las implicaban en un hecho de narcotráfico, lo cual propició la fuga de los otros acusados, Juana Terán y Tomás Veizaga.

Informó que el personal de inteligencia presume que estos últimos personajes se encuentran en Brasil, y que las autoridades de ambos países trabajan en una búsqueda conjunta.