Una niña, de 11 años, y su madre, de 49, fueron baleadas en Caiza, localidad de Yacuiba, Tarija. Cinco familiares, entre ellos un menor de edad, recibieron detención preventiva por los delitos de feminicidio e infanticidio en grado de tentativa.

El violento hecho se registró el domingo, al promediar las 17:30. Los familiares descargaron sus armas sobre ellas, principalmente contra la madre, y luego las arrojaron en una quebrada creyéndolas muertas.

Antes del ataque armado, las víctimas estaban limpiando su casa. Decidieron volver a Yacuiba en motocicleta y, durante el recorrido, fueron interceptadas por dos vehículos. Descendieron cinco personas; el cuñado (hermano del esposo de la víctima adulta) y sus hijos. 

Según la fiscal departamental de Tarija, Sandra Gutiérrez, se conoció, por testimonio de la niña, que los autores sacaron primero un revólver y dispararon contra la madre hasta acabar sus balas. Volvieron a la movilidad por un rifle y atacaron a la menor de edad. Ella puso su hombro para cubrir su rostro y el proyectil cruzó su brazo y pasó por sus labios.

Luego, el hombre, que encabezaba el grupo, pateó a su cuñada en varias partes de su cuerpo pretendiendo comprobar que ya estaba muerta. Las subieron a una camioneta y las llevaron a una quebrada, distante a unos 500 metros del lugar del hecho, donde las arrojaron. La niña esperó que su tío y sus primos se vayan para salir y buscar ayuda. Una vecina la auxilió y, junto con ella, se dirigieron a dependencias policiales.

Gutiérrez dijo que los móviles continúan en investigación. No se descarta que se trate de un caso de “venganza” puesto que el cuñado le dijo a la mujer “mi esposa murió por tu culpa”, mientras le disparaba.

Uno de los procesados fue enviado al Centro Oasis por ser menor de edad. El resto se encuentra en la cárcel de El Palmar de Yacuiba, según una publicación de El País. 

 De momento, la niña se encuentra estable y fuera de peligro, pero el estado de salud de su madre es delicado y mantienen reserva en la información.