Al menos 26 privados de libertad fueron beneficiados con la amnistía e indulto, medidas que les permitieron obtener su libertad la jornada de ayer. El objetivo de estas decisiones gubernamentales es acabar con el hacinamiento como factor de rápida propagación del coronavirus COVID-19 en las cárceles. Los mismos corresponden a varios departamentos del país.

La directora departamental de Régimen Penitenciario, Pamela Suárez, en semanas anteriores anunció que los beneficiados serían aproximadamente 2.500 privados de libertad en todo el país y 400 en Cochabamba.

Asimismo, en una oportunidad señalo que el descongestionamiento carcelario empezaría el 13 de mayo, sin embargo el mismo dio inicio mucho después y, hasta hoy, las cifras estimadas no han sido cubiertas.

El recinto penitenciario de Palmasola, en Santa Cruz, fue el más afectado por el retraso tras registrarse casos positivos y muertes. La semana pasada fueron liberados más de 100 reclusos.

A través de audiencias virtuales se logró su libertad y se espera incrementar el número de beneficiarios en las siguientes semanas.

“A través de la orientación, asesoramiento y patrocinio legal gratuito, se presentó 152 carpetas a Régimen Penitenciario, 69 trámites de indulto y 83 de amnistía mediante los cuales 26 privados de libertad han recobrado su libertad”, dijo Wilma Blazz, directora de Defensa Pública.

Comentó que otras 348 carpetas se encuentran en el inicio de trámite y se espera que más personas sean beneficiadas con el decreto presidencial 4226 de amnistía e indulto a la prontitud posible.

Los solicitantes de indulto o amnistía deben ser mayores de 58 años, mujeres en periodo de gestación o que tengan la tutela de niños de corta edad. Ninguno de ellos debe haber cometido delitos de gravedad, como infanticidio, homicidio, feminicidio o ser reincidentes.