El abogado Porfirio Machado decidió bajarse de la lucha por ostentar la Defensoría del Pueblo. Definió declinar su postulación bajo el argumento de que existiría una “guerra sucia” y que los asambleístas le han dado "la espalda" a la población.  

Machado era uno de los siete finalistas para optar por el cargo. En la primera ronda de votación en la Asamblea, recibió 30 votos en su favor, en la segunda obtuvo 11 y en la tercera apenas 2.

“Estoy allanando el camino porque, ustedes deben recordar, la semana pasada se ha ejercido una violencia política y una guerra sucia entre los postulantes, por tanto, no puedo estar en este afán”, dijo Machado.

Expresó que el cargo de Defensor no puede ser ocupado por una persona que no cumpla requisitos respecto a la promoción y cumplimiento de derechos humanos, pero la Asamblea se “empecina” con postulantes que no cumplen estos preceptos.

“La Asamblea Legislativa Plurinacional, representada por 130 diputados titulares y en igual número de suplentes y 36 senadores titulares, también igual número de suplentes, así como los partidos de la oposición y el oficialismo, una vez más ha dado la espalda al pueblo de Bolivia. No quiere que haya Defensor del Pueblo”, agregó.

Luego de tres votaciones, ninguno alcanzó los 2/3, en medio del desacuerdo político entre las tres fuerzas políticas.

Machado manifestó su esperanza de que, con su declinación, se allane el camino para que la Asamblea pueda elegir al nuevo Defensor.