El Órgano Electoral de Bolivia se comprometió ayer a no interrumpir la difusión de resultados preliminares en las elecciones del 3 de mayo, después de que la suspensión temporal en los fallidos comicios de octubre generara denuncias de fraude.

El Tribunal Supremo Electoral "difundirá todos los datos que reciba a medida que vayan llegando desde los recintos de votación y se compromete a no interrumpir el flujo de información", subrayó en un comunicado, según EFE.

El sistema de Transmisión de Resultados Electorales Preliminares (TREP), empleado en las elecciones de octubre, luego anuladas, será sustituido por otro de Difusión de Resultados Preliminares (Direpre), en aras de reforzar "la transparencia y la confiabilidad". El nuevo software es desarrollado por la compañía británica Reckon, contratada por el Programa de las Naciones Unidas, con recursos de donación de países e instituciones amigas de Bolivia, reportó ERBOL.

Los datos provisionales se podrán comenzar a difundir, en tiempo real, una vez que cierren las mesas de votación, pero no son jurídicamente vinculantes, mientras que el cómputo final tardará más, pero será el oficial para la proclamación de los resultados. A partir de las 16:00 horas, cuando cierren las mesas de votación, está previsto que comience la transmisión de resultados, sin esperar a "tener un determinado porcentaje de datos para difundir la información". En pro de "fortalecer su seguridad y transparencia", el tribunal contará con un nuevo programa informático de recuento de votos, de la empresa británica Reckon, que reemplazará al de la boliviana Neotec empleado en octubre.

ADMINISTRACIÓN PROPIA El Órgano Electoral subrayó que el programa está "bajo supervisión de técnicos" de esta entidad.

El recuento en octubre estuvo cuestionado por denuncias como las que criticaron que fue intervenido por técnicos externos.

Esta entidad "tendrá la administración completa de Direpre, sin que Reckon intervenga en el manejo del sistema informático, y será personal propio el que enviará la información desde los recintos de votación en Bolivia y el exterior.

La interrupción del cómputo provisional el 20 de octubre de 2019 dio pie a denuncias de fraude a favor de Evo Morales, después de que en los primeros resultados tras la jornada de votación apareciera como el más votado, pero sin margen suficiente para evitar una segunda vuelta con el expresidente boliviano Carlos Mesa, de Comunidad Ciudadana (CC).

La reanudación del recuento, unas 23 horas después, daba margen a Morales para ganar en primera ronda sobre Mesa, lo que fue confirmado días después en el cómputo final y declarado vencedor para un cuarto mandato seguido.

Informes de organismos internacionales cuestionaron ese cambio repentino de tendencia y la fiabilidad del resultado final, mientras que otros como varios estudios realizados en EEUU defendieron que estadísticamente sí eran factibles. Por esta situación Morales anunció su renuncia, en noviembre.