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  • Diario Digital | sábado, 20 de abril de 2024
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DEBEN ELEGIR A QUIÉN SALVARLE LA VIDA

Trinidad ya no puede ocultar la crisis sanitaria y política

El silencio cómplice por miedo a represalias dejó sin atención, equipos y medicamentos. El Gobierno concentró sus esfuerzos en el municipio.
Trinidad ya no puede ocultar la crisis sanitaria y política

Trinidad desnudó la crisis sanitaria que enfrenta el departamento de Beni, a poco más de un mes que registrara su primer caso de coronavirus COVID-19.

Fueron profesionales médicos, vecinos y algunos trabajadores de la prensa que, a través de sus redes sociales, denunciaron la situación en el lugar. Utilizaron estos medios por temor a las represalias de políticos, no solo del Movimiento Al Socialismo (MAS) sino también del Gobierno.

En el caso de los periodistas, uno de ellos, que prefirió mantener su identidad en reserva, contó que los medios de comunicación regionales “viven” de la publicidad, por lo que se sienten presionados a no mostrar el drama que sufren en su verdadera dimensión. Como ejemplo, mencionó que en el hospital Germán Bush, catalogado como de tercer nivel, no hay equipamiento y el patio es un foco de infección por la falta de redes de alcantarillado y agua.

Su relato coincidió con el de los profesionales médicos. Jesús Moscoso, el primero en denunciar las irregularidades y negligencia de sus superiores, tras contraer el virus y autoaislarse. Tuvo que pedir respaldo de su ente matriz local y nacional para que no se cumplan las amenazas de despido y procesos en su contra por contar que fue obligado a trabajar pese a tener los síntomas del coronavirus. Actualmente, cerca de la mitad de los profesionales dio positivo.

Los vecinos también se pronunciaron al mostrar imágenes de velas en los domicilios, como símbolo de esperanza, las marchas de protesta de los trabajadores de salud y las cruces en el cementerio.

El drama continúa pese a que el Gobierno, esta semana, centró sus esfuerzos en el departamento.  El país en general se pronunció, a través de campañas, para enviar medicamentos, insumos de bioseguridad y más a los benianos.

Quebrado emocionalmente, el jefe médico del hospital de Trinidad, Etsel Gutiérrez, relató la difícil situación que atravesó cuando tuvo que decidir entre salvar la vida de una persona mayor y la de una doctora por falta de equipos. Dijo que desde ahora deberán tomar ese tipo de decisiones, según ERBOL.

Cuatro amenazas en 8 meses dejan impotencia y dolor

La capital de Beni, Trinidad ha encarado al menos cuatro amenazas en ocho meses en lo político, pero también en la seguridad y su economía, dejando impotencia y dolor entre los pobladores que se desentienden de los partidos políticos que “tomaron” el país y llevaron a una crisis.

1. En octubre, el país se pronunció contra el presunto fraude electoral e inició un paro nacional con bloqueos que se prolongó por varias semanas exigiendo nuevas elecciones, lo que derivó en la renuncia del expresidente Evo Morales. Trinidad no estuvo al margen de las medidas de presión, lo que generó daños en su economía.

2. En febrero, la seguridad se vio vulnerada con la explosión de una garrafa en la cárcel de Mocoví que dejó un fallecido y una veintena de heridos por una pugna de poder. Dos meses antes, seis reos escaparon, de los cuales tres fueron recapturados, uno falleció en enfrentamiento con la Policía. En mayo fueron recapturados dos de los prófugos.
El penal es una “bomba de tiempo”. Tiene más de 600 presos y al menos un centenar con problemas respiratorios.

3. En el mismo mes de febrero, la presencia de langostas causó alarma ante la amenaza de afectación a los cultivos por la plaga. Los productores estuvieron pendientes ante la invasión. El municipio se caracteriza por su vocación productiva.

4. La pandemia destapó falta de atención a la salud y convirtió al municipio en el segundo con más casos. Fue declarado zona de desastre y alistan el encapsulamiento de una semana desde este lunes para contener el coronavirus COVID-19.