Roly Mamani es un joven alteño que lleva su trabajo fuera del país. Las redes sociales y el Tik Tok le acercaron más a las personas que requieren una prótesis para sus extremidades superiores.

Recientemente concluyó con un prototipo que enviará a Curacao, una isla cerca de Venezuela, donde está Joselito, una persona de 45 años que sufrió un accidente y perdió la mano, a la altura de la muñeca.

“Joselito es de República Dominicana y quiere recuperar la confianza para volver a su país de origen. Ahora tiene miedo hacerlo. Ha estado muchos años así”, contó.

Según Roly, ya hizo exportación de algunos de sus equipos en Latinoamérica, específicamente a Perú, a través de un trabajo a distancia. 

Se trata de prótesis biomecánicas que se mejoran cada medio año y se destinan a personas de escasos recursos.

“Hasta ahora hemos ayudado a casi 200 familias de Bolivia y del exterior. Hay personas que perdieron las dos extremidades, por ejemplo”, agregó.

Destacó que su participación en las redes le permitió conocer más casos y mostrar que la ciencia es divertida y el trabajo que se hace.

Roly explicó que el apoyo es con el 50% del costo de los materiales y la mano de obra, previa evaluación y en muchos casos, cuando la situación económica lo permite, se hace la donación.

Una situación similar se tiene con las prótesis para mascotas. 

Pese a que la pandemia frenó sus actividades, contó que ahora se busca trabajar con personas y empresas, a través de la responsabilidad social, para patrocinar a quienes requieren de estas prótesis electrónicas y robóticas que se mejoran, además que se implementan las que son biomecánicas.