La presencia de las Fuerzas Armadas (FFAA) y la Policía en las ciudades del país como medida para preservar la seguridad ante anuncios de protestas y movilizaciones de las bases del Movimiento Al Socialismo (MAS) generaron diferentes repercusiones de apoyo y rechazo. 

El viceministro de Régimen Interior, Wilson Santamaría, citado por ABI, anunció un patrullaje “constante y continuo”.

"Tenemos que habituarnos porque vamos a tener la presencia de la Policía y las FFAA porque hay gente que manda mensajes de desinformación por un posible rebrote de bloqueos y, obviamente, estamos trabajando para darle tranquilidad al país".

En principio, desde el Gobierno, anunciaron que los operativos conjuntos durarían hasta el 24 de enero, tras anuncio de movilizaciones de las organizaciones del MAS por el Día del Estado Plurinacional del 22 y a la espera del discurso del expresidente Evo Morales, a través de pantallas gigantes, desde Buenos Aires (Argentina).

Entre tanto, la diputada Betty Yañiquez (MAS) dijo que se solicitará la "desmilitarización" bajo el artículo 10 de la Constitución Política del Estado de "ser un país pacifista". Además, añadió, según ANF, que ese tipo de actitudes significarían provocación y enfrentamiento y es lo que no se quiere en absoluto. 

La presidenta de la Asamblea Legislativa Plurinacional (ALP), Eva Copa, pidió al ministro de Defensa, Luis Fernando López, que retire a los militares de las calles de las ciudades capitales del país y del trópico de Cochabamba, al considerar que esta situación genera susceptibilidad y una posible nueva confrontación.

"No es oportuno. Creo que la Policía está para hacer este trabajo en torno a dar estabilidad social y poder resguardar el orden en nuestro país y las Fuerza Armadas tiene otra tarea. Esto lo único que está haciendo es confrontarnos entre sectores y nuevamente volver a generar psicosis en nuestro país”.