El ministro de Salud, Aníbal Cruz, anunció el lunes una "reingeniería" del Sistema Único de Salud (SUS) debido a que la anterior administración del sector asumió compromisos, como el pago de 8.000 ítems sin reservar recursos económicos, entre otras irregularidades y temas que dejó pendientes.

"De manera irresponsable la anterior administración del ministerio ha comprometido que a partir del 31 de diciembre los 8.000 ítems para el seguro universal, que pagaban los municipios, sean pagados por el ministerio, por lo que estamos viendo la forma de cómo realizar una reingeniería", dijo a los periodistas.

El ministro explicó que Montaño se comprometió a pagar desde el 31 de diciembre los salarios de los 8.000 ítems para el SUS, pero sin contar con los recursos que se requieren para ese objetivo, por lo que será necesario que los programas del Ministerio de Salud que no sean productivos vayan a cubrir esa demanda de ítems.

Cruz consideró ese compromiso como un "grave daño económico" al presupuesto de salud, ya que implica un déficit de 56 millones de dólares, al margen del crecimiento vegetativo que se debe cubrir.

Indicó que en horas de la tarde se llevó adelante el último gabinete del año, en el que expuso ante la presidenta Jeanine Áñez y sus colegas la situación "caótica" por la que atraviesa el sistema de salud.

Indicó que el Ministerio de Salud quedó con deudas pendientes de pago, tales como el desembolso a las clínicas privadas por servicios prestados que fenecen el 31 de diciembre, el alquiler de varias oficinas dependientes de ese despacho que sobrepasa los 2 millones de bolivianos al año, monto que podría destinarse a la atención de los pacientes con cáncer.

La autoridad pidió a la población tranquilidad, ya que el derecho a la salud establecido en la Constitución Política del Estado (CPE) está garantizado y desde su despacho hará todos los esfuerzos para brindar atención médica gratuita a los bolivianos.