La Federación Sindical de Trabajadores Mineros de Bolivia (FSTMB) a través de su secretario general, Gonzalo Quispe, informó que un ampliado nacional definirá el rol de este sector en la actual coyuntura y el uso de la dinamita. Lamentó, además, que el ministro de Defensa, Javier Zavaleta, desde la posición que ocupa amenace con decenas de muertos. 

“Estamos viendo con bastante preocupación lo que sucede (…). La dinamita es extrema y ha sido utilizada para recuperar la democracia, que es un bienestar de todo el pueblo boliviano (…). Pero estamos analizando y vamos a ver en un ampliado este tema y otros que son muy delicados que se están viviendo en el país”, dijo el dirigente.

Lamentó las declaraciones del ministro de Defensa, Javier Zavaleta, quien amenazó con contar decenas de muertes si el líder cívico Luis Fernando Camacho continuaba alentando movilizaciones.

“Las autoridades deben llamar a la pacificación. No se puede instar a la violencia e intimidaciones y más bien llamar a la pacificación a través del diálogo para enfrentar esta situación difícil que está viviendo el país”, dijo.

El dirigente señaló que no es concebible el enfrentamiento entre hermanos bolivianos, por lo que pidió la pacificación y el respeto a la democracia, que ha sido conseguida gracias a la lucha de la clase proletaria y más empobrecida.

“Deberían llamar a los actores implicados y de una vez que haya tranquilidad y paz en todo el pueblo boliviano”, sostuvo.

A la FSTMB se señaló que haberse parcializado a favor del Gobierno de Evo Morales a cambio de prebendas, al igual que la dirigencia de la Central Obrera Boliviana.

El conflicto en Bolivia se desató tras conocerse el cuestionado cómputo electoral que le dio como vencedor a Evo Morales en la primera vuelta. En medio de denuncias de fraude, se cumple quince días de paro, donde el departamento de Santa Cruz fue el más contundente bajo el liderazgo del presidente cívico, Luis Fernando Camacho.