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  • Diario Digital | sábado, 20 de abril de 2024
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ANTICIPA SIMILITUD CON PINTO

México otorga asilo a Quintana; Bolivia niega salvoconducto

México otorga asilo a Quintana; Bolivia niega salvoconducto

El Gobierno mexicano concedió el jueves asilo político al exministro de la Presidencia, Juan Ramón Quintana; no obstante, el ministro de la Presidencia, Jerjes Justiniano, anticipó que no se le entregará el salvoconducto porque tiene orden de aprehensión. Asemejó el caso con el del exsenador Roger Pinto, quien tuvo que vivir 454 días en la embajada de Brasil.

"(...) El Gobierno mexicano ha decidido otorgar asilo político a Juan Ramón Quintana, que tiene una orden de aprehensión. Esto podría resquebrajar las relaciones diplomáticas entre ambos países", sostuvo Justiniano, citado por ANF.

Quintana buscó asilo tras la convulsión social entre octubre y noviembre que terminó con la renuncia de Evo Morales a la presidencia del Estado. Varias exautoridades y dirigentes del MAS buscaron asilo en la legación mexicana, la canciller Karen Longaric dijo que fueron al menos 27 personas.

Justiniano anticipó que el Gobierno no entregará el salvoconducto a Quintana,  porque pesa sobre él una orden de aprehensión por una denuncia de terrorismo y sedición, cuando ya había dejado de ser ministro.

"No se va a entregar el salvoconducto y sucederá algo muy parecido, que no se entienda como revanchismo, pero es algo parecido de lo que sucedió con el exsenador Roger Pinto a quien ya se le otorgó asilo, pero el Gobierno no le entregó el salvoconducto", detalló Justiniano.

El 28 de mayo de 2012, el entonces senador Pinto ingresó a la embajada de Brasil con el benefició de asilo político. Sin embargo, después de 454 días, el 23 de agosto de 2013, huyó en un vehículo oficial, con escolta de militares brasileños y la ayuda del encargado de Negocios de esa legación, Eduardo Saboia.

El Gobierno de Evo Morales se negó a otorgarle el salvoconducto, bajo el argumento que Pinto tenía procesos penales presuntamente por corrupción.

Justiniano precisó que el Gobierno transitorio no pretende romper relaciones con México, porque es una decisión transcendental que no puede asumirse por una situación circunstancial, como es este caso.