“Cómplices”, “justicia”, “aprendiz de Murillo” y otras frases se escucharon a gritos en la sesión de interpelación de la Asamblea Legislativa Plurinacional al ministro de Gobierno, Eduardo del Castillo, sobre la detención de la expresidenta Jeanine Áñez.

Parlamentarios del Movimiento Al Socialismo (MAS) y la oposición (Creemos y CC) cruzaron palabras, así como golpes de puño, patadas y jalones de pelo, convirtiendo el hemiciclo en un verdadero “circo” y “bochorno”.

Pese a esto, Del Castillo, luego de su intervención, recibió la confianza de la mayoría de los miembros de la Asamblea.

Los reproches hacia Áñez salpicaron a los parlamentarios de la oposición a quienes la autoridad calificó como “cómplices” del “golpe de Estado”, muertes, corrupción y hasta narcotráfico. Desde la bancada de Creemos se le respondió que es “aprendiz” y “remedo” de Arturo Murillo, su antecesor.

Tras mostrar un video sobre los sucesos de 2019 y llamar, en reiteradas oportunidades “cómplices” y “asesinos” a los opositores, se desató la violencia y se declaró un cuarto intermedio.

LAS ACUSACIONES

Al retomarse la sesión, y con los ánimos más calmados, la autoridad continuó con su intervención en la que aseguró que se respetaron todos los procedimientos legales para la detención de Áñez, garantizó que se respetan los derechos y el debido proceso.

Insistió en que hubo un “golpe de Estado” en 2019 y negó que haya existido fraude. Mencionó como argumento los estudios que cuestionan las conclusiones del informe de la OEA, que identificó irregularidades en las elecciones y lo llamó un panfleto.

Dijo que persisten algunos “parásitos” que creen que será suficiente lavarse las manos respecto a los hechos cometidos por Áñez y propuso a la oposición realizar una proposición acusatoria por el caso gases, caso contrario serán “cómplices de la narcodictadura”.   

Propuso a la oposición realizar en conjunto una proposición acusatoria contra la exmandataria por el caso gases lacrimógenos, debido a los decretos aprobados para esa adquisición, y señaló que de lo contrario serán “cómplices de la narcodictadura”.

También planteó que se le acuse en conjunto para hacer justicia por las víctimas de Senkata, que estaban presentes en el acto.

LA RESPUESTA

Opositores, según ERBOL, calificaron a Del Castillo como “carcelero” y “comisario del régimen”. Le recordaron que en el pasado fue parte de manifestaciones en que se enfrentó contra la Policía incluso con petardos y que fue denunciado por acoso político por Eva Copa cuando era funcionario del Senado, entre otros temas.

El jefe de bancada de Creemos, Erwin Bazán, cuestionó que sea ministro alguien que tiraba cohetes a la Policía.

Dijo que el Ministro solo pide justicia para quienes le conviene, pero no así por los muertos de Montero de 2019, el fallecimiento del activista Julio Llanos en La Paz o la quema de las casas de Waldo Albarracín y la periodista Casimira Lema.

Bazán advirtió que si el Ministro pretende ir a la OEA a desvirtuar el fraude con sus presentaciones de Power Point hará el “ridículo”.

“¿Qué podemos esperar de este aprendiz de Murillo? Murillito le deberíamos decir a Del Castillo”, agregó al calificarlo de “manipulador”, “ridículo” por sus arengas y de “fascista” por alentar la confrontación queriendo parecer un “paladín de la justicia”.

Agregó que Del Castillo quiere hacerse parecer como “paladín de la justicia”, pero no pasa de “aprendiz de Murillo”.   

El diputado también de Creemos, Walthy Eguez, manifestó que la autoridad querrá que le digan “Bolas”, como era el apodo del exministro, pero en realidad no llega ni a “Bolitas”. También criticó su actitud y le dijo que no está en programas de televisión como “Caso Cerrado” o “Laura en América”.

Criticó la actitud del Ministro y le dijo que no está en programas de televisión como “Caso Cerrado” o “Laura en América”.  

La diputada Tatiana Añez recordó que Murillo también tenía expresiones como Del Castillo, de decir que no descansará hasta encontrar justicia, pero le avisó que “cuidado termine como el exministro, ahora detenido en Estados Unidos”.

Entre disculpas y denuncias

Tras protagonizar una pelea en plena sesión de interpelación al ministro de Gobierno, Eduardo del Castillo, el senador de Creemos, Henry Montero, pidió disculpas a la población boliviana y pidió a sus colegas legisladores respeto a las autoridades electas.

“Bolivianos, mil disculpas. Soy un profesional electo para poder legislar, pero lastimosamente han armado un show y un circo. Decirles que no es mi accionar así, pero dada las circunstancias sucedieron estos hechos y espero que no vuelvan a suceder y que nos enmarquemos siempre en el respeto y que estemos en esta asamblea para legislar por los bolivianos y no para un partido de gobierno o para defender a un partido de gobierno”, expresó el parlamentario, según Urgente.bo.

La diputada Estefanía Morales anunció, citada por ABI, que la bancada del MAS presentará una denuncia formal ante la Comisión de Ética de la Cámara de Diputados por las agresiones registradas en la sesión de la Asamblea Legislativa Plurinacional.

Acusó a la diputada Tatiana Áñez (Creemos) y el senador Henry Montero (Creemos) que se enfrascaron en una pelea con la diputada del oficialismo Gloria Callizata y Antonio Colque.